23.

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Nuevo capitulo!!!!! n.n



Kenji se sentó en la pequeña mesa, frente a los dos presentes, sabiendo aun que desconfiaban de él.

-Pueden comprobar mi rostro en la base de datos -les dijo entonces con una sonrisa falsa, a lo que ambos se miraron y se preguntaron porqué no lo habían pensado antes -Antes de olvidarme -continuó y sacó del bolsillo de los jeans un sobre pequeño blanco -Ethan me ha dado esto para entregartelo -se lo tendió a Grayson -Me ha dicho que te lo diera cuando te viera en casa de Helena, y como te he visto, te lo entrego.

Grayson frunció el ceño, pero aun así, lo tomó. Otra maldita carta dejaba el muy infeliz.

-No la he abierto -aclaró y Grayson la observó con poco entusiasmo y la dejó a un lado.

-¿Qué es lo que sabes? -preguntó entonces sentándose en la cama.

-Lo único que sé es que me ha dejado encargado del cuidado de los últimos dos Theroux que quedan, aunque ahora se suma otro más -comentó y lo señaló con la cabeza -Tienes impregnado su olor -comentó como forma obvia de porqué lo sabía.

Grayson rodó los ojos e intentó borrar sus ella frase de su metros. Lo último que le faltaba era que encima, oliera como él.

-¿Qué es lo que hizo Ethan? ¿Por qué está viajando todo el tiempo por todos lados? -preguntó entonces y el japonés se encogió de hombros.

-Me gustaría contestarte la pregunta, pero no me ha dicho nada de lo que tenía planeado hacer. Es más, no tengo noticias de él desde hace tiempo. Lo único que sé es que ha tenido problemas con el líder de la mafia alemana y que iba a ocuparse de ello.

Aiden y Grayson se miraron, para luego suspirar con pesadez.

¿Acaso Ethan no había dejado a nadie informado de todo lo que tenía planeado? Se preguntó Grayson hasta que su mano se volvió a topar con la carta que le había dejado. ¿Y si allí le decía algo al respecto?


***


Se sentó en la cama, colocandose el salto de cama de seda de un color borgoña, para luego levantarse y mirar a un costado de su cama, hacia él, quien dormía plácidamente, y que sabía no despertaría por un buen rato. No luego de la noche que habían pasado.

Su cuerpo ciertamente, había perdido algo ya de musculatura y ejercicio, pues había estado más que enterado que él ejercitaba todos los días, aunque fuera poco tiempo y aquello pasaba factura entonces.

Lo observó de arriba a abajo, viéndolo completamente desnudo, a su merced, durmiendo boca abajo, sabiendo que lo tendría para él hasta conseguir lo que quería de él, pero luego ¿qué? ¿Qué haría con el gran Ethan Theroux, del cual quedaba solo una sombra de lo que había sido?

Suspiró con pesar y escuchó que llamaban a la puerta.

-Adelante -dijo y uno de los tantos que trabajaban en la mansión se asomó.

-Siento molestarle señor, pero el médico ha llegado.

Sergey asintió con la cabeza y se levantó.

-Levántenlo dentro de una hora, comenzará a hacer ejercicio de ahora en adelante -le ordenó mientras pasaba por su lado, a lo que el hombre de mediana edad, simplemente asintió, acatando sus órdenes.

Fue entonces que se dirigió a su despacho, encontrando al hombre ya esperándolo sentado.

-Señor -dijo cuando lo vio ingresar y se levantó, extendiendo la mano hacia él, la cual Sergey aceptó con un leve apretón, antes de rodear el escritorio y sentarse del otro lado.

-¿Y? -habló entonces -¿Algo importante para decir?

-Honestamente, no hemos encontrado ningun avance, como tampoco cómo hacer más rápido el embarazo del alfa puro, sabe que es algo complicado.

Sergey suspiró con pesar y apoyó uno de sus codos en el apoyabrazos del asiento, para luego apoyar su cabeza en su mano.

-¿Me está diciendo que seguimos igual que hace dos meses?

-Lo siento mucho, señor -se disculpó y realizó una pequeña venia -Pero sabe que no es fácil. Lo supo desde el momento en que el alfa puro se ofreció a llevar a su hijo.

Sergey chasqueó la lengua cansado.

-Sé perfectamente que es más que complicado que un alfa puro quede embarazado y más aún, si es hombre, pero usted prometió una forma de evitarlo y no estoy viendo ningún tipo de progreso -abrió uno de los cajones de su escritorio y sacó un arma de este, apuntando hacia el médico -¿Debería de buscar a un científico más eficiente? -le preguntó sin dejar de apuntarle.

El hombre, por su parte, palideció al tener el cañon de este a escasos centímetros de él.

-N-N-No... Señor -balbuceó con miedo y lo dejó sumamente claro al liberar sus feromonas, las cuales Sergey sintió.

-Entonces sea competente de una buena vez y consiga lo que le estoy pidiendo, sino, me veré en la obligación de buscar a alguien más calificado -hizo una seña con la mano para que se fuera -Ahora puede retirarse.

-De acuerdo, señor -contestó y se levantó con temor, sin dejar de mirarlo.

-Si para dentro de un mes no hay avance alguno sabe lo que le sucederá -dijo entonces cuando el hombre tomó el picaporte de la puerta y sintió como la autoridad de Sergey se alzaba por encima de la suya.

-S-S-Si, señor -titubeó y se fue, sin siquiera girarse a mirarlo.

Guardó el arma cansado entonces y estaba a punto de levantarse, cuando llamaron a la puerta, mostrándose entonces uno de sus informantes.

-Señor -dijo e ingresó.

-¿Qué sucede? -preguntó al verlo acercarse.

-Hemos conseguido algo que seguramente le interesará.

-¿Las direcciones de los dos Theroux que aún siguen sueltos? -preguntó con una de sus cejas alzadas, pues desde que habían perdido de vista a Kenji Watanabe no había tenido noticias ni de uno, ni del otro omega Theroux.

-Algo mejor -le contestó y le tendió lo que parecía ser un ultrasonido.

-¿Y esto?

-Estuvimos averiguando y parece ser que el alfa con el que se ha acostado Ethan Theroux ha quedado embarazado.

Sergey frunció el ceño, observando con atención el ultrasonido.

-Eso es imposible, han pasado solo dos meses -miró al alfa que le había llevado aquella información.

-Parece ser que será alfa el niño que lleva dentro. Lo ha confirmado su obstetra. Nos ha dado toda la información que necesitábamos -le tendió entonces el sobre que el médico le había entregado -Parece que dentro de un mes sabrá incluso ya su género.

Sergey entonces observó nuevamente el ultrasonido, pensando.

-De acuerdo -anunció unos minutos después -Manténganlo vigilado y en cuanto sepan el género informen.

-Como ordene señor -dijo el hombre y se retiró.

Sergey al quedar solo volvió su mirada al ultrasonido, formando en sus labios una amplia sonrisa divertida. Aquello iba a ser divertido.

Un recuerdo entre laberintos y mentiras [TERMINADA]Where stories live. Discover now