Presa Por Casualidad - Camren [Traducción]

Capítulo 43

Camila se veía absolutamente anestesiada y entregada al poder de la risa genuina de Lauren. Le encantaba ese sonido y saber que había sido causado por ella sólo la hacía sentirse aún más bendecida. Su ficha aún no había caído de que estaba suelta, tanto ella como a Lauren.

- Y entonces... - Ella comenzó. - Que tal si dejamos a los animales ahí, después de todo ya los alimentamos mucho... - Ella hizo una breve pausa para reírse. - ¿Y si vamos a comer, hm?

- Parece una buena idea. - Lauren respondió al oír roncar su estómago.

- Bien, porque estoy hambrienta y tú también debes estarlo. - Camila dijo, extendiendo la mano en el aire sólo para sentir a Lauren entrelazar sus dedos antes de empezar a caminar.

- ¿Ya resolviste algo con tu hermana? -Lauren preguntó y Camila dejó que el aire se le escapara de los pulmones, negando.

- No, y todavía tenía que arreglar algo para mi madre hoy, pero cuando me enteré de que podrías ser liberada, quise resolverlo luego. - Lauren asintio.

- Gracias por cubrir el dinero de mi fianza. - Lauren pidió, haciendo que Camila la mirara culpada. - Te devolveré lo que has completado, solo necesito que esperes a que consiga trabajo. - La menor se mordió el labio inferior y abrió la puerta de su coche, viendo a Lauren dar la vuelta en el vehículo y entrar en él.

- Tenemos que hablar de eso. - Camila dijo tan pronto como entró en el coche y cerró la puerta, girándose hacia Lauren. - Pagué tu fianza completa. -Dijo una vez. Lauren iba a decir algo, pero Camila fue más rápida. - Normani va a casarse y me pareció justo que ella disfrutara con Dinah, ¿sabes? Así que le dije que usara el dinero para eso.

- Cierto. - Lauren dijo parpadeando un poco avergonzada. -Yo le devolvería el dinero, así que lo que le daría a ella te lo daría.

-No quiero de vuelta ese dinero. - Camila dijo y Lauren la miro seriamente. - Por favor, no nos convirtamos en esa pareja cliché donde la rica y la pobre se pelean porque una quiere ayudar y la otra no la deja. -Camila pidió, inclinándose para depositar un beso en los labios de Lauren.

-Es porque soy yo en el papel de la pobre. No es tan simple como parece. - Lauren dijo y Camila rió en voz baja, asintiendo.

- Lo sé, pero, cariño, te amo y tú me amas. Acabas de salir de la cárcel y aún no trabajas, no quiero que pienses en devolverme un dinero que usé en mi beneficio también.

- ¿En tu beneficio?- Lauren preguntó y Camila asintió. 

- Por supuesto. No tendré que ir a visitarte a la cárcel cada semana. Puedo verte cada vez que te extrañe. -Ella dijo y Lauren sonrió tímidamente.

- Bien, solo ve a la dirección donde yo te diga. - Lauren dedujo y Camila se mordió el labio inferior, haciendo que Lauren arqueara una ceja por su expresión. - ¿Qué?

-Uh, sobre eso de la dirección... -Ella dijo, metiendo una mano en su propio cabello para tirarlos hacia atrás. -Me gustaría que te quedaras conmigo en mi apartamento. - Lauren abrio los ojos de repente.

-Camz...

- ¡Cálmate! - Camila pidió riendo. -No te estoy pidiendo que te saltes un paso en nuestra relación, amor, no tengo prisa. - Aclaró- Es sólo que... Normani se va a casar en unos meses y va a vivir con Dinah. No sabemos cuánto tiempo vas a tardar en estabilizarte, así que creo que es mejor que te quedes conmigo y, mira, incluso puedes dormir en el cuarto de huéspedes como prueba de que hablo en serio. -Dijo riendo. -Y cuando estés en un trabajo estable y estable alquilas algo para ti y me dejas de nuevo. - Dijo, haciendo un pequeño drama al final de la frase, lo que causó una risa dulce en Lauren.

- ¿Juras que no te voy a estorbar? - Lauren preguntó y Camila asintió.

- Entonces acepto. - Lauren dijo, viendo a Camila golpear el aire en una celebración silenciosa. - Boba. -Ella susurró, empujando a Camila a un beso suave, algo que obviamente la chica no protestó. - Pero vendremos otro día para agradecerle y charlar un poco. - susurró sobre los labios de Camila cuando terminaron de besarse.

- Trato hecho. - La menor dijo. 

-Además mis libros y mis cosas de allí me las traerá ella. -Lauren habló y Camila asintió.

- Genial, ahora vamos a comer y a comprarte algo de ropa. -La sonrisa de Lauren vacilado un poco.

- Camz...

-Amor, no tienes ropa. - Lauren sintió que su cara se calentaba y se hundió en la curva del cuello de su novia.

- ¿Ese dinero al menos puedo devolverlo más adelante? - Pidió inhalando el olor de Camila, que asintió lentamente.

- Pero sabes que no es necesario, ¿verdad? - Ella dijo y Lauren asintió, ajustándose en el banco para volver a mirarla.

- Pero me sentiría mejor si pudiera. - Ella dijo y Camila asintió. - Empezando con la ropa que me compraste. -Señaló la propia ropa del cuerpo. - ¿Cuánto costó? - Camila frunció el ceño y negó con la cabeza.

-Esa no va a contar. ¿Ya la aceptaste. -Camila replico.

- ¿Cuánto? - Lauren pidió firmemente y Camila se mordiscó el labio inferior.

- ¿Cuánto costaría en un lugar normal? -Camila preguntó y Lauren rió.

- ¿Pagaste una fortuna, no? -Preguntó y Camila asintió cautelosamente.

-Es suave y de buen tejido, además el material de confección no causa alergias en la piel.

- Camila, el pobre no tiene alergia en la piel por la ropa barata. -Lauren dijo riendo y Camila tomó su mano.

- Lo siento. -Pidió ruborizándose, pero todavía sonriendo.

-No te disculpes. Ahora dime, ¿cuánto fue?

-No fue tan caro, digo... cerca de lo que acostumbro, uh... - Una tos seca fue pronunciada por ella, pero frente a la mirada aburrida y seria de Lauren ella bufo. - Está bien, setecientos dólares.

- ¿Camila! - Lauren vociferó. -Alguien te está robando en este mundo. ¿Setecientos dolares en una camisa y un pantalón?

- No te quejes, había algunas con precios más altos, pero sabía que no lo aceptarías.

- ¿Y ésta la aceptaría?

- Era la más barata del lugar. - Camila se defendio.

- ¿La mercancía incluye seguro de vida? - Lauren preguntó y Camila la vio confundida, haciendo suspirar a Lauren antes de reír.

- Mira, te voy a enseñar un par de lugares donde incluso la ropa buena puede ser barata, ¿de acuerdo? Podrías haberlo encontrado por ciento cincuenta dólares y ahorrarías quinientos cincuenta dólares. -Dije enlazando los brazos alrededor de Camila.

- Mientras no te enojes conmigo por comprarte ropa acepto lo que quieras. - Camila dijo sonriendo.

-Te lo devolveré. - Lauren alertó y Camila se rió.

- Cierto...cierto. -Habló riendo, repartiendo pequeños besos por la cara de Lauren. -Ahora vamos.

- Mi estómago agradece la preferencia. - Lauren habló, haciendo reír a Camila y asentir, encendiendo el coche y poniéndose el cinturón antes de salir de allí.