PROTEGIDA Parte Tres

Capítulo 7

   En la entrada de la casa, Stella cargaba a Morgan en sus brazos mientras despedían a su madre.

-se cuidan mucho, si?- pidió Pepper dandoles  un beso a cada una y punto de marcharse a Washington D.C. con los demas. Ambas asintieron con una sonrisa.

-adiós Mami!- grito la pequeña mientras Pepper llegaba a su auto.

-adiós niñas!- saludo por ultimo ingresando en el vehículo, pero volvio a  bajar al olvidar dar una ultima orden -y recuerden, a la cama antes  de las 10 pm, y no coman  golosinas en la noche o les dara insomnio- dijo y volvio al carro mandandoles un beso en el aire.

-como usted mande jefa!- grito Stella entre risas. Ambas chicas se quedaron allí riendo y saludando a la mujer mientras ponia el auto en marcha.

-sonrie solo un segundo mas...- dijo la Stark mayor, Morgan obedeció,  y las dos mantuvieron las sonrisas y las manos saludando hasta que el auto se alejo por completo.

-y... se fue!- confirmó Stella, las chicas se vieron entre ellas y rieron, ahora estaban solas  -muy bien, dime, que quieres hacer?- pregunto a su hermanita, dispuesta a cumplir sus caprichos sin ninguna restricción. No es que fuera necesario, Morgan era una niña adorable, pero se le hacia divertido sentir que podían hacer lo que quisieran sin que nadie les estuviera diciendo "no hagas eso" "no coman aquello"  sentir esa pizca de picardía de niña denuevo.

-podemos preparar un pastel enorme!?- pregunto Morgan ansiosa, Stella la miro con dulzura, podria pedirle cualquier cosa y ella accediera, pero le pide un pastel.

-claro que si!- contesto rapido con una sonrisa  -haremos un pastel gigante, como mas te guste, ve por tu chaqueta y nos iremos a comprar lo que necesitamos-

-sii!- exclamó la pequeña feliz, corriendo a su habitación por algo de abrigo.

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  Ambas salieron de camino al supermercado mas cercano, llegaron tras algunos minutos conduciendo, Morgan no tardo en bajar del auto y correr hacia la linea de los carritos de compra, Stella adoraba verla feliz aunque sea con cosas tan sencillas, como lo era intentar maniobrar el carrito y no chocar contra los anaqueles.

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-trajiste la lista?- le preguntó a la pequeña, Morgan se había tomado el trabajo de anotar lo que comprarían, para según ella, no olvidarse de nada.

-aqui esta- mostró orgullosa un pequeño papel rosa con algunas palabras y dibujos en el, Stella lo tomo e intento descifrar lo que decía, Morgan estaba aprendiendo a leer y  escribir, algunas palabras estaban claras y otras eran casi garabatos.

-bueno, tú ve por el azúcar yo ire por harina, nos encontramos en el pasillo de las bebidas, lista?- pregunto antes de comenzar la carrera, Morgan asintió y ambas se prepararon.

-ya- dio la orden y la niña salio corriendo, ella fingio como que tambien lo hacia, pero continuó caminando.

-hey! Llegaste antes que yo- exclamó fingiendo sopresa ante la velocidad se la niña. 

-podemos llevar esto?- pidio señalando las neveras de bebida gasificada. Morgan quería Coca-Cola.

-no no no, no bebemos eso en casa- contesto su hermana rápidamente

-porque  no?- protestó la niña cruzando los brazos.

-basicamente es agua con veneno- murmuró Stella a si misma,  pero era un día en que harian lo que quisieran, asi que accedió.
-solo  esta vez si? Y mamá no puede saber- Morgan asintió con una sonrisa satisfactoria.
Stella abrio la nevera y tomó la bebida pero al cerrarla ésta cayo al suelo.
En el reflejo de la puerta de vidrio pudo verlo, mirandola fijamente, con un semblante sombrio, se volteó de prisa para asegurarse de que fuera él, de que fuera Loki  y enfrentarlo, pero allí no había nadie, se apuro y reviso cada pasillo buscandolo, pero nada.