¿Mi Destino? ~×KenHina×~ [Completa]

¿Qué se supone qué diga si ya me cambiaste?

Decidí ir a la escuela y cuando entré al salón donde siempre nos reuníamos para platicar sobre las competencias, los recuerdos llegaron y estaba muy triste por eso pero al mismo tiempo feliz.

—Vaya, vaya ¿Pero que tenemos aquí?, Al enano de vuelta. —dijo alguien atrás que por la voz supe de inmediato de quién se trataba.

—Tsukishima... —dije para que este me mirará sarcástico y de lado estaba Yamaguchi como siempre era.

—¿Te corrieron de tu nuevo hogar después de tanto? —agregó sarcástico, pero no me molestaba ya que sabía que le gustaba hablar de más para molestar.

sonreí de lado. —No, solo estoy de visita. —agregué.

—Sabía que dirías algo así, después de todo es lo mejor que sabes hacer. —sonrió malévolo, quería molestarme y pues lo consiguió pero no le daría el lujo de notarlo.

—¡¿Cuál es tu maldito problema cuatro ojos?! —exclamó Ken al ver que me quedé callado.

—Oh vaya, tenemos a otro tarado por aquí. —respondió con el mismo tono de antes.

—¿¡Qué dijiste maldito?! —respondió Ken algo molesto.

—¿Estás molesto? ¿Herí tus sentimientos? —repitió sarcástico y poniéndose enfrenté suyo fulminándolo con la mirada.

—Y-Yo. —tartamudeo asustado y supuse que era por la altura que poseía pero para mi ya era algo normal.

—¿Qué pasa? ¿Ya te comió la lengua el ratón? —repitió.

—Ken, ya no digas nada. —dije para que no siguiera.

—¿Cómo porque dices mi nombre y me das ordenes enano? —preguntó Tsukishima.

—¿Eh? —respondí no entendiendo.

—Me llamó a mi idiota. —respondió Ken algo fastidiado.

—¿Qué? —dijo asqueado.

—¿Algún problema?

—Es que Tsuki se llama Kei y algunas personas lo llaman Ken por error, pero él ya se acostumbro a eso. —contestó Yamaguchi.

—¡Cállate Yamaguchi! —reprochó Tsukishima fastidiado.

—Si Tsuki. —respondió Yamaguchi feliz.

—¿Por qué esté tarado tiene casi el mismo nombre que yo?

—No lo se.. —respondí.

—Pues tendré que pedirle a mi madre que me cambie el nombre porque algún idiota también lo tiene y es molesto. —dijo nuevamente sarcástico.

—¡T-Tú!

—¿Hinata en serio solo viniste de visita? —preguntó Yamaguchi.

—Así es. —respondí melancólico.

—Ya veo.. —respondió algo triste.

—Mejor no hubieras venido. —dijo Tsukishima algo molesto.

—¿Por qué? —respondí.

—Sabes bien porque, además Tobio te odia. —dijo sarcástico nuevamente.

>>–¿Tobio? –pensé.<< 

—¿Hablas de Kageyama? —comenté y pude ver un sonrojo en su rostro.

—Si ese molesto rey. —agregó de lado.

>>–¿Cuándo se habían vuelto tan cercanos? –pensé.<<

—¿Cuándo recibí tu llamada sabes lo que pensé? —dijo alguien acercándose, pero al verlo ya sabía que me esperaba, no conteste por lo que prosiguió. —Quería contestarte y maldecirte pero pensé que eso no sería suficiente, así que supuse que vendrías a este lugar y ve como acerté.