Capítulo XV

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—¿Sabes que ya sé tu verdadera edad, no?

—Lo sé, Fran —contestó la rubia para después beber su trago.

El barman sonrió de costado.

—Me recuerdas mucho a una amiga que tuve. Sólo por eso te dejo estar aquí.

—¿Y qué le pasó a tu amiga? ¿Se encontró con otro hombre guapo y se fue? —preguntó burlándose.

—No. Envenenaron su bebida y murió justo donde estás sentada.

Annie palideció.

—Wakala —dijo arrugando la cara.

Fran rió.

—Te estoy molestando.

Annie hizo un puchero. Luego miró extrañada a la rocola que se encontraba a un costado de la barra. Se reproducía "Boys" de The Beatles.

—¿Cómo es que aún tienes esa vieja rocola? —preguntó la muchacha.

—Esa rocola es genial —respondió mientras limpiaba un vaso de vidrio con un trapo—. Me lo regaló mi abuelo.

—Como detesto a los Beatles... ¿Quién los escucha hoy en día?

—¡Oye, los Beatles son geniales! —exclamó a la defensiva.

Annie negó con la cabeza. Se levantó de su asiento y fue hacia la rocola. Introdujo una moneda para cambiar de tema. Entonces sonó "Somebody to love" de Queen y la rubia volvió a su asiento.

—¿Queen? —preguntó Fran extrañado para luego levantar los hombros y disfrutar de los coros.

Annie siguió tomando su trago con tranquilidad.

—¿Tus amigos escuchan Queen?

—Mis compañeros escuchan a los Arctic Monkeys —dijo con molestia.

—¿Arctic Monkeys?

El tema había finalizado y reprodujo "Fairy King" de la misma banda.

—Sí, ya sabes, una nueva banda. A todos les gusta lo nuevo. Apenas tienen un álbum.

—¿Y al chico que te gusta le gusta los monos árticos?

—Te dije que no me gusta, Fran. Sólo me interesa... —declaró con una sonrisa de costado.

Fran la miró y sonrió.

"Definitivamente se parece a mi amiga...", pensó.

—¿No prefieres un batido, Annie?

—Sólo si tú me invitas —sonrió de manera inocente.

Fran sonrió sin reír.

—Está bien. Pero ya no tomes eso. No te hará muy bien —dijo mientras se iba a la bodega para sacar frutas.

—Oblígame... —musitó mientras se terminaba el vaso.

Cuando la canción se terminó, se escuchó "Bring Back That Leroy Brown", de Queen. Era el tema favorito de Annie.

En ese instante, se escuchó la puerta abrirse. Annie no volteó, pero los vio a través del espejo que había detrás del estante de las botellas. Eran Bertolt, su compañero de clase, y un rubio más alto y de buena forma, que supuso que estaría en un grado superior.

El lugar había sido abierto minutos antes de que Annie llegara, por lo tanto, se encontraba vacío, a excepción de ella y los recién llegados.

—Agh... Queen... —dijo el rubio asqueado para luego dirigirse a la rocola.

Sin protecciónWhere stories live. Discover now