Última Oportunidad

Capítulo 37

DÍAS DESPUÉS.
[Lunes 13 de Diciembre de 2027]

-Narrador.

Las bajas temperaturas se han apoderado de la cuidad desde hacia días atrás. Los cielos despejados con climas fríos acompañan día con día a los habitantes que deben salir a cumplir con sus obligaciones del día.

Desafortunadamente también es su caso.

Por la mañana, tuvo que salir muy temprano rumbo al hospital para ir a recoger sus análisis y fijar una nueva fecha para realizarse la operación. En un principio habían acordado que su pareja lo acompañaría a recoger los resultados, pero las bajas temperaturas con las que despertaron hicieron que Emilio tuviera que quedarse en casa a cuidar de su hijo para evitar exponerlo de manera innecesaria al clima frío.

Al final, fue bueno que el rizado se quedara en casa.

Después de salir del hospital, decidió dirigirse a su oficina para tener un tiempo a solas y poder aclarar su mente e ideas sin tener que estar escuchando las discusiones de su familia de fondo. Se tomaría un par de horas para decidir lo que haría además de que aprovecharía su presencia en la empresa para conocer al nuevo modelo que hacía algunos días habían contratado.

Su oficina se encuentra sumida en un completo silencio que le produce cierta ansiedad. Al ser padre de un niño pequeño y tener una pareja que disfruta de estar molestando a su hijo, son pocos los minutos en los que puede disfrutar del silencio. No esta acostumbrado y eso -sumado a lo contrariada que esta su mente- lo hace sentirse abrumado.

Gracias al cielo no tiene que pasar tanto tiempo sumido dentro de ese abrumador silencio. Quince minutos después de su llegada, la puerta de cristal se abre de manera escandalosa revelando la presencia de su mejor amiga, quién de inmediato se adentra a la habitación y cierra nuevamente la puerta a sus espaldas.

Bianca: Al fin te dignaste a llamarme después que que me tuviste abandonada todos estos meses. Como ya tienes esposo, ya te olvidaste de tu mejor amiga -lo primero que hace es reprochar la desatención que ha tenido de su amigo los últimos meses- Joaquín, sinceramente nunca pensé que el primer mensaje que recibiría de tí, después de semanas, sería tan frío y demandante. ¡Sólo me dijiste que necesitabas que viniera a tu oficina de inmediato!. No te dignaste a preguntarme cómo me encontraba, no preguntaste si estaba ocupada o si deseaba mover la reunión a otra fecha. ¡No puedes exigir mi presencia en el momento en que se te dé la gana, Bondoni! -regaña. En realidad no está molesta con el chico, únicamente desea hacerle entender que antes de pedirle algo debe preguntar si está disponible y desea ayudarlo-

Aunque en realidad ella nunca le negaría su ayuda. Siempre han estado para el otro y Joaquín le ha ofrecido su apoyo y ayuda cada que lo ha necesitado, por lo que sería demasiado malagradecida si no lo apoyara cuando él lo necesita.

Joaco: Lo sé y lo siento por todo, pero en ese momento estaba tan abrumado y confundido que lo único que pensé fue en mensajearte. Eres la única a la que puedo confiarle algo como esto, así como también eres la primera a quién se lo cuento.

Bianca: ¿Paso algo malo? -pregunta más no da tiempo a contestarle pues ya se encuentra formulando un nuevo cuestionamiento- ¡¿Le pasó algo a Alex?!

Joaco: ¡Todo está bien con Alex! -levanta ligeramente la voz- Lo que tengo que decirte no lo involucra tan directamente, aunque su postura también es de suma importancia.

Bianca: Dime que pasa, me estás poniendo nerviosa, Joaquín. ¿Te pasa algo a tí?, ¿tuviste algún problema con alguien?, ¿Emilio te hizo algo malo? -cuestiona con algo de intriga. El castaño de inmediato se encarga de aclararle que el rizado no lo ha lastimado- ¿entonces?