Mi chica es un chico 2.0

Dulce bienvenida, dulce cena

No sé qué pasó hoy, Draquito estaba de un humor terrible, se levantó tarde y no pudo desayunar, en clase le tiraron una poción asquerosa encima y se puso a maldecir a medio mundo, estaba de un humor insoportable, se va a su "nidito de amor" y regresa con la sonrisa más amplia que nunca, saludando y caminando por las nubes, a veces pienso seriamente que un día de estos yo misma lo mandaré a San Mungo por Bipolar, aunque supongo que primero debería de saber el porqué de semejante cambios así que ¡chisme! ¡Chisme!, luego te cuento, querido Diario. Con cariño: Pansy

Ese había sido un día terrible para Draco, se había levantado tarde, apenas y había comido y en clase de pociones un idiota lo había bañado en una apestosa y horrible poción de color verde musgo que olía asqueroso, por lo que había sido la burla de todos, aunque sin duda su mirada había dejado al causante muerto de miedo, se bañó fácil 3 veces para hacer que el olor desapareciera y había pasado al menos 2 horas revisando cada mechón de cabello platino, para asegurarse que no le quedara ni rastro de esta, aquel incidente le había hecho perder casi todas las clases y ahora debía buscar con los idiotas de sus compañeros las tareas, que sin duda iría a hacer a su refugio para así relajarse un poco y que nadie lo molestara y si Harry se aparecía, bueno, mínimo tendría el consuelo de tenerlo cerca y eso tal vez le haría sentir mejor, subió las escaleras y reviso que nadie lo viera, al entrar vio a Harry que esperaba impaciente recargado en el escritorio y que al verlo esbozo una sonrisa que casi hizo suspirar a Draco.

Sin palabras Harry extendió su mano al rubio que acababa de llegar, esperando que la tomara, lo vio mirarlo extrañado y dudar un poco, hasta que tomo su mano y Harry lo jalo para acercarlo lentamente a él, aún en silencio acaricio su rostro y se perdió en esos brillantes ojos plata, viendo desconcierto pero ternura en ellos, junto primero su frente a la de Draco, jurando que podía escuchar música de fondo, mientras miraba sus ojos y rodeaba la delgada cintura con sus brazos, ni siquiera escucho caer la mochila de Draco al suelo, pero si notaba el adorable sonrojo en sus mejillas y casi podía escuchar el rápido palpitar de su corazón, que se unía al palpitar propio, algo que le hizo sonreír, mientras acercaba más sus rostros, lo último que vio fue a Draco cerrar sus ojos en ciega confianza, antes de cerrar los suyos y sentir lo suaves que eran los labios de Draco, sintiendo como una corriente eléctrica le recorría desde ahí hasta la punta de los pies, haciendo que su corazón se desbocara por un contacto tan puro, tan dulce, entreabrió sus labios para apresar el labio inferior de Draco que abrió su boca suavemente, acto que aprovecho Harry para acariciar esa suave piel con su lengua, logrando así acceso al Slytherin, probando la dulce menta, el sabor de Draco en un beso en extremo dulce, en extremo suave, casi casto, pero con ese saborcito ardiente y delicioso de la pasión, se separó muy lentamente, casi sin querer, abrió sus ojos, encontrándose con las orbes plateadas de Draco, sonrió.

Draco estaba perdió Harry ¿lo había? ¿Lo había b...? ¿besado? Y además de esa manera tan deliciosa... tan... y luego le sonreía, esa sonrisa de infarto que le ponía el cerebro en blanco y le hacía perder el piso, que de hecho perdió, porque las rodillas le fallaron, Harry lo abrazo, sujetándolo y llevándolo a sentarse en la cama, pero sin soltar el suave agarre de su cintura, Draco llevó su mano a sus labios

- e... eso fue

- un beso- dijo Harry tomando su mano, acariciándola delicadamente, Draco le miro a los ojos

- ¿Por qué...?

- Porque... ayer me di cuenta que me gustas... me gustas mucho- dijo Harry algo sonrojado, pero con una mirada decidida, sorprendiéndose al ver a Draco sonreírle coqueto

- Pues sí que te tardaste Potter, eres de lento aprendizaje- menciono riendo

- ¡Hey!- dijo el moreno aparentemente molesto, riéndose después y dándole un besito en la mejilla- no es demasiado tarde ¿verdad?- dijo tomándole el rostro suavemente