Il Palio

20 5 2
                                    

Nuestro viaje no podía detenerse sólo por este inconveniente. Nos quedaba poco para llegar, no podíamos parar aquí.

El resto del viaje no fue muy difícil. Los días pasaban muy tranquilos.

Entonces, vimos una pequeña ciudad.

••Esta conversación es en francés••

- ¿Perdone, Sir, sabría decirme en qué territorio nos encontramos?- preguntó Eleonor.

- Je seulement peux parle un peu de français (Solamente puedo hablar un poco de francés). - respondió el Sir, ya que en todo este tiempo, hemos necesitado a Eleonor para el francés.- Estáis en Siena, se celebrará Il Palio dentro de poco.

- ¿Il Palio?

- Sí, es la carrera de caballos a la que quiero ir.- respondió Kalte (es humana).- pregúntale dónde podemos recibir ayuda.

- ¿Quién nos puede hablar de Il Palio?- preguntó Eleonor.

- Ínsula 10, habitación 45.

- Merci.

- De rien, au revoir.

Nos dirigimos dónde nos había indicado el señor. Allí se alojaba un señor de nuestra edad, más o menos.

- Mi nombre es Julio Octavio, organizador de Il Palio. Puedo ver, señorita, - dirigiéndose a Eleonor- que es francesa, por su acento. Tranquila, puede hablar conmigo en su lengua materna, la entenderé perfectamente.

Eleonor se sentía cohibida, nadie la había tratado así, con tanta confianza en tan poco tiempo.

- Julio Octavio, me podría dar instrucciones sobre la carrera aquí celebrada? Mi amiga desea participar.

- ¿Quién?

Kalte, intuitivamente, se adelantó un paso.

- ¿Es una chica? No puede participar. Es sólo para hombres. (En francés se dice igual, pero se escribe diferente). De todas formas, ha sido un placer.

Kalte rodó los ojos. No había entendido nada, pero sabía que ese tono serio que había puesto de repente al dar un paso al frente la decía que era un no.

- Kalte, no puedes participar.- dijo Eleonor.- Es sólo para chicos.

- Vale, vámonos.- dijo Kalte, retirándose rápidamente.

Nos dimos un paseo por Siena hasta que encontramos una ínsula con habitación libre. Decidimos tener una reunión en la habitación de Luci y Eleonor.

- ¿Y ahora qué piensas hacer?- pregunté a Kalte, que estaba muy resentida por el machismo.

- Pues no sé.

- De pequeña asistí a los títeres de los juglares.- dije, recordando.

- ¿Y qué?- dijo Kalte.

- Contaban la leyenda de un guerrero chino cayó enfermo, y esa enfermedad fue mortal. Su mujer tenía una hija de edad casadera y un hijo pequeño. La chica, para conservar el honor de su familia, decidió vestirse de hombre e ir al ejército. (Múlan)

- ¿Y de qué nos va a servir?- preguntó Kalte.

- Pues puedes trasvestirte.- dije- Esta carrera te hacía mucha ilusión, por eso te trágicos de viaje sorpresa aquí.

- Acepto.- dijo Kalte. - La competición será en unos días, y no hay tiempo que perder.

- Empecemos. - dijo Randal, con una navaja (que siempre traía para emergencias), se disponía a cortar el pelo de Kalte.

- Espero que Julio Octavio no se haya fijado mucho en tu aspecto, nos fastidiaría el plan.- dijo Luci.

Ahora Kalte era casi irreconocible, con el pelo corto, como el de Randal, que les llegaba a las orejas.

- Me voy a comprar vendas.- dijo Kalte.

- ¿Para?- preguntamos todos.

- ¿Pues para que va a ser? Tengo que amarrarme las en torno a mi pecho para disimular.

- Tienes razón.- dijo Eleonor.

- No te hacen falta vendas.- replicó Randal.- Ya eres plana de por sí.

- De verdad Randal, me casé contigo por pena.- respondió, cerrandonos bruscamente la puerta.

≈ARCLILS Y≈

Hacia Siena -🕛Finalizada🕙-Where stories live. Discover now