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~Narrador omnisciente~

Los padres de Alice se encontraban sentados junto a ella en la mesa principal. Acababan de cenar y discutían sobre el próximo paradero de su hija en lo que vendría del verano.

Alice había obtenido excelentes calificaciones en la universidad y se había propuesto descansar y divertirse lo suficiente en el verano para recompensarse a si misma por su arduo trabajo.

Su madre, Hally, había conseguido un ascenso y viajaría por los próximos 4 meses a California. Era una grandiosa noticia pero su hija no podría quedarse sola por aquel periodo tan largo.

Cabe mencionar que Alice no era una niña. En unas semanas cumpliría los 21 años y sabía perfectamente como cuidarse. Sin embargo Hally consideraba que vivir sola era exponerse a vicios y no dejaría que su hija cayera en ninguno de ellos.

—Mamá, no pasara nada malo si me quedo aquí en casa. No soy una chica problema y lo sabes— dijo Alice mientras revisaba las historias de Instagram de sus amigos. Todos se iban de viaje o a sus casas de playa.

Lo que Alice decía no era del todo cierto. A pesar de no haber causado problemas a su mamá jamás, había hecho varias locuras con sus amigos pero era más que obvio que las mantenía en secreto.

—Ni lo sueñes, no quiero mi casa destruida por fiestas, pijamadas o sea lo que sea que hagan los jóvenes—respondió Hally de inmediato mientras recogía los platos.

Alice soltó una risita. No despegaba la vista de su dispositivo. De todas maneras le daba igual si pasaba los siguientes 4 meses en su casa o en la de su padre, pues saldría con sus amigos de todas formas.

—Entonces se quedará conmigo ¿verdad?—gritó James para que su ex-esposa quien se encontraba en la cocina lo oyera.

Alice miró a su padre desanimada y suspiró. La casa de James quedaba a 1 hora y a pesar de ser más grande, no era para nada divertida.

—Si, es la única opción—respondió la madre al regresar al comedor.

Alice rodeó los ojos e hizo un gesto de desagrado y como si eso no bastara, se cruzó de brazos, dejando por fin el celular.

Hally le devolvió el gesto y restandole importancia al show de su hija, empezó a limpiar la mesa con un trapo y aromatizante.

James palmeó a Alice en la espalda y le sonrió apliamente. —En casa también tengo Wi-fi y netflix—dijo el.

A Alice le invadió la ternura y no pudo evitar sonreir. A los 42 años, su padre intentaba estar al tanto de las modas solo para poder tener más temas de conversación con su niña.

—Recuerda que la casa de tu papá está a 15 minutos de la playa. Puedes ir con tus amigos. Además Raven puede quedarse a dormir allá— dijo Hally sabiendo que aquello la animaría.

— Y hay un nuevo centro comercial a unas cuadras y siempre veo jóvenes como tú— agregó su papá.

—Está bien, está bien... supongo que será divertido—Culminó Alice y se dirigió a su cuarto para empacar sus cosas.

Perdóname 《K I M  T A E H Y U N G》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora