un novio para Kook¹ | taekook

꒰ O23 ꒱

Su corazón seguía latiendo aceleradamente, su mente era un lío y la luz era poco perceptible en ese lado.

Ya estaba totalmente frito.

No sabía por qué esas mariposas seguían y en su cabeza la imagen de su jefe. Solo era un simple aprecio a TaeHyung ¿Después de un beso? Solo estaba confundido.

Nunca había aprendido esas cosas, nunca se lo tomó en serio, pero no sabía lo que sentía y eso le daba miedo, mucho miedo. No quería terminar como su madre, no quería.

Varias veces se había dejado llevar por eso, como las primeras veces en la entrevista, cuando se removió incómodo al ver a TaeHyung, pero eran nervios. Otras veces durante el trabajo y realmente se confundía con eso, porque simplemente no quería entablar esa relación, esa unión... ¿Qué le estaba pasando?

De todas esas situaciones nunca llegó analizar todo a fondo, pero ¿Y si lo hacía? Obtendría respuestas y muchos miedos más, muchos miedos más a los que día a día se enfrentaba. Y cuando ya se sentía todo bien, llegaba otro y otro.

Mejor dejar de sentir que volver a perder.

Ya cerca de su casa, de su hogar, de la única manera de calmarlo totalmente... Su familia.
Porque por eso estaba, por su familia, por Nayeon, por Somi, por JiMin y por... Por él mismo.

Si es que así podíamos decirlo.

Abrió la puerta rápidamente. Estaba cansado, adolorido y más, inexplicablemente solo quiso huir de eso, de eso que podría hacerlo vivir o morir o ambas.

Los ojos confusos ante su llegada tan repentina se hicieron esperar, creía que tal vez le dirían algo cuando una tierna castaña lo abrazó fuertemente con mucho cariño.

— JungKookie ¡Te extrañe! — La menor de todos abrazó a su hermano mientras este abrazo era correspondido. JungKook tuvo que recortar su estatura para estar a la de la más pequeña.

— Yo también SomSom — Un pequeño beso en la cabeza de la pequeña y se separaron para ver a Nayeon con el ceño fruncido y un leve puchero.

Ya sabía lo que se venía

— ¡Hey! ¡Tú nunca me has recibido así! ¿Por qué a ella si la tratas con mucho cariño y a mí no? — Unas risas y el adorable puchero que adornaba el rostro de la castaña se intensificó. JungKook rio suavemente para darle un lindo abrazo a su hermana del medio.

Ya todos sabían que Nayeon se iba a quejar. Lo que no cabía en su mente era que la castaña con quince años de edad se fuera a comparar con una niña de once años. Le había parecido muy tierno y pellizcó suavemente las mejillas de ambas para dirigirse al sofá.

— ¿Por qué llegaste tan temprano? — Preguntó el rubio mientras mantenía una mirada fija al azabache. JungKook tragó duro y tocó su pecho de forma dramática.

— Oh ¿Acaso no me quieres aquí? ¿Ya perdieron su amor por mí? — Las chicas rieron, el rubio negó y le dio un leve golpe en su hombro.

En la mente del mayor sentía que había algo raro con su sobrino. JungKook normalmente no era tan dramático en ciertos aspectos, o recibía de forma tan cariñosa. Sabía que algo había en medio de esos comportamientos poco comunes.

— JungKookie, Nayeon se comió todo el helado y también la Nutella — Somi hizo un puchero mientras que una risueña risa salía de los labios de la castaña.

La expresión de indignación de JungKook hizo a todos estallar de risa. JiMin aún seguía examinado las actitudes de su sobrino... Todo estaba muy raro.

— Jeon Nayeon — La nombrada abrazó a su hermano por detrás — ¿Por qué te comiste todo?

Somi reía silenciosamente. Le gustaba esos momentos de su familia, donde JungKook no era tan serio y era más dulce, donde podía hacer que su hermana mayor perdiera la paciencia y dónde su tío JiMin cocinaba ricas galletas. Él último era su preferido.