08_Los Bakker

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Capítulo 8

~❁ ❁ ✦ ❁ ❁~

Mamá trabajaba de lunes a viernes hasta las seis de la tarde, los sábados, hasta mediodía. Se levantaba a diario antes de las seis de la mañana para alistar a mi hermana y hacer el desayuno. Papá descansaba aún menos. El único día de la semana que dormían tranquilos era el domingo.

Podía llamarlos para que abriera la puerta, pero sería lo más desconsiderado que habría hecho en mucho tiempo.

Le dije a mis amigos que se adelantaran y cuando iba de regreso Nika salía de la mansión con paso apresurado.

—¿Y Dax? —pregunté intentando ignorar la desnudez de su torso.

—Duerme como bebé —explicó avanzando a mi lado—. No debiste quedarte sola aquí afuera.

—Le pasé una nota a mi madre por debajo de la puerta. No quería despertarla con un mensaje.

—Igual es peligroso.

—¿Peligroso? —dije deteniéndome—. Aquí no hay nadie más que nosotros y nuestras familias, listillo. Lo más peligroso que encontrarás será un mapache o una ardilla gorda.

No entendí qué le dio gracia, pero rio por lo bajo.

—Eso no lo sabes. En la oscuridad suceden muchas cosas.

—En la de tu cabeza, quizás.

—¿Por qué eres tan arisca? —preguntó bloqueando la puerta—. Pareces un gato. Recuerdo haberte ofrecido una tregua —añadió guiñándome un ojo.

Tenía que estar mal de la cabeza con esos cambios de humor.

—No recuerdo que respetaras esa tregua en el auto. —Me estremecí con el aire helado de la madrugada—. ¿Podemos entrar? Estoy muriendo de frío.

—Me doy cuenta —se burló señalándome.

Crucé los brazos sobre mis pechos, hoy tampoco llevaba sujetador.

—Idiota.

Me siguió hasta el recibidor.

—¡Ves! Me llamas idiota y no te recuerdo agradeciendo por salvarles el culo. De nos ser por mí seguirían en la fiesta y lo que haces es ponerte chillona.

Acababa de entender lo que me desesperaba de él. La mayor parte del tiempo hablaba con esa calma juguetona.

—Hablaste de lo que no te importa en el auto —dije cuando cerró la puerta a nuestra espalda.

—Trataba de hacer conversación porque las princesitas no saben conducir.

—No te metas con Sophie.

No te enamores de Nika © [LIBRO 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora