Nueve.

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Oh, los amores de secundaria.

Son una mierda, o eso pensaba Luzu.

¿Algo tan cliché? Siempre veía a las parejas de su clase discutir por estupideces y hacer un drama por tonterías.

Jamás estuvo interesado en ello, hasta que conoció a Raúl.

Estaban haciendo un ejercicio en clase. Trataba de conocer mejor a los integrantes de tu clase de la Universidad.

- Muy bien, la confianza será fundamental aquí en mi clase, y quiero que os conozcais todos. — dijo la profesora Raquel — Hareis dos filas, y cuando yo de una palmada comenzais a hablar con el de enfrente. Teneis cinco minutos, después caminareis hacia la siguiente persona, ¿entendido?

La profesora dió una palmada.

Luzu miró a la chica castaña que estaba enfrente suya. Tenía un gorro oscuro y unos ojos grandes.

- Mh, ¿que te gusta hacer? — inquirió Luzu.

- Cortarme. ¿Que te gusta hacer a tí?

¿Cortarse?

Aquello descolocó a Luzu.

- Mh... leer. ¿Por qué te gusta cortarte? — murmuró.

- Disfruto con el dolor. — se encogió de hombros — ¿Por qué te gusta leer a ti?

- Disfruto con... las letras, supongo.

- ¿Quieres ver mis cortes? — la chica levantó la manga derecha de su sudadera, mostrando todo tamaño de distintos cortes. Unos recientes y otros más antiguos.

- Yo, mh, creo que no es muy sano hacer eso....

- ¡Cinco minutos! ¡Siguiente! — exclamó la profesora.

Luzu ahora estaba frente a una chica de cabello rubio oscuro. Su mirada parecía indicar que todo le daba igual, no estaba interesada en nada.

- Hey, ¿que tal?

- Todo bien, ¿y tú? — sonrió Luzu.

La chica le sonrió, leve, pero sonrió.

- ¿Tienes algo especial que contar? — animó Luzu.

- Descubrí que era bisexual a los 8. Y opino que tienes una sonrisa muy bonita. — contestó Lydia.

Luzu se sorprendió. Asintió, sonriendo.

Danni le contó que sus hermanos lo atormentaban porque era ateo y su familia era católica, cada cena de Navidad le hacían que la estancia fuese imposible de soportar; Silvia era madre soltera, ya que su novio la dejó cuabdo se enteró de que estaba embarazada; un chico, Steve, le dijo que sufrió Fibrosis Quística; Mario dijo que tuvo problema con el Crack, pero que ahora ya no toma drogas fuertes, solo marihuana....

Borja no había conocido hasta ese día a una chica que disfrutase cortandose, a una chica que era bisexual, a un chico que tenía un horrible problema con sus hermanos, a una chica que fuese madre soltera....

Se sentía como un idiota, bebé llorón. Esas personas habían sufrido mucho, y él nada. Se sentía como un perrito faldero ladrandole a los problemas, mientras que esas personas habían sufrido bastante.

Su mirada se dirigió hacia un chico más alto que él, con un piercing. Suspiró.

- ¿Te sientes como un bebé llorica y como un gilipollas después de haber escuchado a esta gente hablar sobre sus problemas y ahora solo deseas ir a pensar en lo estúpido que te sientes?

Hey, Auron...Where stories live. Discover now