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Gonzalo

—¿Donde mierda se metió?— pregunté para mi, me venía despertando y Lu no estaba en su habitación, pase de una habitación a otra hasta que escuche agua caer en el baño, dándome a entender que se estaba duchado

Antes de irme me devolví y pegue mi oreja a la puerta al escuchar que estaba cantando una canción, sonreí inconscientemente, su voz era súper buena y linda, me encantaba, dejé de escuchar el agua caer pero seguía cantando, entretenido me quede ahí como un boludo escuchándola, hasta que mi cuerpo se hizo para adelante y traté de no perder el equilibrio.

—¿Que mierda haces acá?— preguntó algo molesta y sorprendida mientras se tapaba bien con la toalla que tenía en el cuerpo

—Y-yo, perdón perdón Lu, no era mi intención, te escuche cantar y...no se, me dio intriga y m-me quede escuchando— dije nervioso, seguro estaba como un tomate enfrente de ella

—Creí haberte dicho muy claro que, no quería que me escucharas cantar, ni aunque fuera por error— murmuró negando con la cabeza

—Perdóname, te dejo para que te cambies y nos vemos abajo, prepare algo de comer

—Gracias Gonza— susurró y se metió a su habitación

Solté aire y me ventile aire con las manos, como si fuera una nena, tenía las mejillas calientes pero no sabía si era por que me atrapó escuchándola, o por que me habían llamado tanto la atención sus piernas que me habían puesto mal, como un virgo, negué con la cabeza sacando cualquier pensamiento de ese tipo y puse la mesa para que cuando bajara, ya pudiéramos desayunar normal.

La vi bajar ya cambiada y tragué grueso, me hice el boludo con mi celular y se sentó enfrente de mi, dejé mi celular de lado y empezamos a desayunar.

—¿Sabes algo de Daniel?— me preguntó sin verme

—Si, esta con, ya sabes, en su casa

—O sea que ayer que se fueron juntos, quiere decir que ¿se quedó con el?— cuestionó tragando saliva y me alce de hombros

—N-no se Lu, supongo que si, pero mejor no pensar en eso— dije para calmarla y negó con la cabeza

—Soy una boluda, siempre le gustó esa pendeja de mierda, ¿como fui tan pelotuda?— se sugestiono a sí misma y negué con la cabeza

—No digas esas cosas Lu, la gente se enamora sin saber, solo pasa, y no te podes culpar por eso, no todo lo hacemos voluntariamente— dije y ella se rió bajito, como si tuviera vergüenza

—Pero yo ya lo sabia, se re notaba antes de mudarme, lo supe, Daniel siempre a sentido cosas por ella y yo voy y me enamoro como si me fuera a dar bola, ¿viste como si soy una tarada?

—Lu— masculle para que deje de decir tantas boludeces y se alzó de hombros— posta no digas eso, me da bronca que no te des cuenta el pedazo de piba que sos

—¿Vos que sabes? antes no decías eso...— dijo alzando la voz cansada y fruncí el ceño

—¿Antes?— cuestioné confundido y soltó un suspiro levantándose de la mesa para irse al living y sentarse en el sillón, la mire de lejos y rodé los ojos, me levante yo también y me acerqué lentamente sentándome a su lado— Lu... mírame, eu

—¿Que?— preguntó con los ojos cristalinos y sentí una sensación no muy linda en el pecho

—Tranquila, no necesitas nada de esto, no necesitas venirte abajo por cosas que no fueron tu culpa, valórate más flaca, si yo fuera vos, me sentiría re buena y hermosa, por que lo sos. Sos mas que suficiente, más que Juana y más que cualquier piba, y no te estoy tratando de chamuyar ni mucho menos, te lo digo como amigos que somos, ¿por que lo somos verdad?

—Sabes que si— murmuró sonriendo un poco y yo también sonreí— ¿tenes algún tipo de superpoder? me hiciste olvidar todo

—Puede que si, no se, capaz— tanteé un poco y rodó los ojos riendo

—Igual tengo que salir de acá, me voy con Daniel

—No— negué rápido e hizo puchero— se bien por que queres hacerlo y no está bien, en vez de sentirte mejor te vas a sentir peor, y no quiero eso, ni vos tampoco y lo sabes

—Es que me enferma pensar que estarán haciendo— susurró mirando al suelo y le sobe la espalda

—Lo se, pero mejor no penses en eso, ¿queres hacer algo terminando de desayunar?, podemos ir a una plaza, así te distraes— hice una pausa, viniéndome una idea a la cabeza— o podemos ver la posible existencia de una sessions tuya y mía

—La plaza suena bien— dijo rápido y sonreí revoleando los ojos

—Bueno, pero ya no llores— le limpie las lágrimas y la levante del sillón— termina o no te saco a pasear

—Pelotudo— dijo mirándome con cara de orto y terminó su desayuno

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—¡Ay mira que linda esta!— dijo feliz mirando una campera de color rosita— esta preciosa

—¿Y cuando cuesta?— pregunte buscándole el precio

—Mil trescientos trece— dijo mirando la etiqueta y chasquee la lengua— Daniel dijo que me prestaría plata para todo pero no está

—Y llévatela, la pago yo y no me debes nada, que sea un regalo, ahre— dije dándosela y me miró dudosa

—N-no se, no quiero que gastes plata innecesaria en mi

—No pasa nada Lu, anda tómala, y te puedo comprar otra cosita si queres, no te voy a cobrar nada— masculle y tomó la campera con una sonrisa, me miró de nuevo y se tiró sobre mi cuerpo para abrazarme, me quede estático en mi lugar, sin saber que hacer, solo rodeé su cuerpo con mis brazos y se separó después de un rato nerviosa

—Perdón, soy una pesada— se disculpó pasándose el pelo para atrás y me rasque la nuca nervioso

—No pasa nada— carraspee— vamos a pagarla

Pase mi brazo por sus hombros y caminamos hasta la caja, pagamos y salimos de la tienda, después entramos a otra y a otra, pero solo quiso un jean nada más, dijo que no quería "abusar", y no se por que quería que abusara de mi, con plata, o...sin plata. Sin duda Lu se merecía todo lo bueno, y no era justo que sufriera tanto, la paciencia que tenía para bancarme mientras me tomaba fotos con los fans que me reconocían, se lo tomaba bastante bien y pacífica, algo que a mi también me gustaba.

Daniel, pedazo de piba que te perdiste, dije en mi mente, sonriendo como un boludo.





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según yo no tenía ideas, y miren, creo q salió bien el intento.
voten <3

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