Dulce Venganza [Jenlisa]

Capitulo 3 [Tomaria su corazón]

Pasaron tan solo unos dias en los cuales la castaña se instalo en aquella ciudad, Fueron pocas las veces en que de manera sigilosa espió la casa de aquel hombre, sin embargo nunca logro mirarle a el o algun miembro de su familia. Se habia planteado una idea sin embargo aun no era nada concreta. Sin embargo aun era dueña de una de las empresas mas reconocidas por lo cual su trabajo tambien tiraba peso sobre ella.

Por ello se encontraba en aquel lugar mientras los papeles desordenados cubrian aquella mesa.

—¿Esta lista para ordenar? — Pregunto gentilmente la camarera mirando como los ojos perdidos de jennie se posaron sobre el menu.

—Yo- Quizas...—Miro sin comprender El menu puesto que las bebidas y comidas tenian nombres raros para ella.—Quizas luego...—Le sonrio amable.

La chica tan solo se marcho y la castaña cubrio su mirada entre aquel menu evitando la vergüenza. Suspiro antes de tomar su movil para poder investigar sobre los platillos o siquiera algun buen cafe. Miro varias opciones y entre ellas encontro uno que le llamo bastante la atencion, asi que se dispuso a ordenar aquello, sin embargo al momento de ponerse de pie algunos de sus papeles cayeron y ella no dejo de maldecirse por aquel pesimo dia.

Recogio cada documento intentando ordenar un poco su mesa, pese a que aun era un poco temprano aquel lugar ya contaba con algunos clientes que no le quitaban la mirada.

—Te hizo falta este—Aquel joven le miro sonriente mientras le entrego aquella hoja.—Una mañana dificil ¿No?—La castaña asistió mientras acomodo sus documentos.—Tu no eres de aqui ¿Cierto?—Jennie de nuevo asintió.

—Estoy aqui por negocios—Se limito a responder.

—Asi que mujer de negocios—El chico no dejo de sonreirle.—Luces muy joven —La elogió, Esperando un buen gesto sin embargo la castaña no se molesto en mirarle.—Yo tambien se de negocios..—Intento entablar una conversación pero jennie no parecia interesada.—¿A que te dedicas?

—Al comercio —Mintió, tirando esas palabras a secas.

—Interesante —Dijo pasando su mirada por sus papeles.—Yo trabajo con mi padre, en Su Empresa, es productor y..

—No recuerdo a ver preguntado —Fue fría, incluso si el joven le miro con fragilidad.

—Entiendo, así que tu —Sus palabras se quedaron a medias,un tanto desanimado.—Te dejo seguir en lo tuyo —dice.—Por cierto, mi nombre es bambam manoban, Fue un placer chica de negocios.

Y se marchó. Jennie quien en cuestión de segundos sintió como su corazón Fue apretado con gran fuerza, levanto la mirada rápidamente. Observando como el joven se acomoda en una de las mesas. No le reconoció, incluso en su mente no paso por su cabeza que aquel chico fuera hijo de ese hombre. Contiene la respiración mientras presiona sus labios con fuerza.

Se pone de pie, recogiendo sus papeles, incluso si no esta convencida de lo que hará, aquella turbia idea no suena nada mal en su cabeza y sabe que no puede perder de vista a aquel chico por que solo entonces el puede ser el talón qué lo guíe para poder destruir a aquel hombre.

—Disculpa—El chico la mira en cuestión de segundos.—Lo de hace un momento, Yo..—detiene sus palabras, intentando mostrar una personalidad fragil.—Lo lamentó, no quise ser grosera contigo.

Y entonces esa sonrisa la volvió culminar.

—Esta bien, no tienes que preocuparte —Le dice, siendo amable mientras la invita a tomar asiento.—¿Cual es tu nombre?—pregunta y la castaña solo sonríe.

—Jennie—estira su mano para estrecharle.—Es un gusto conocerte, Bambam, ¿Cierto?—El chico cabello rosa asiente.

—No es muy común, pero es mi nombre artístico.

—¿Eres cantante o algo así?—pregunta jennie arqueando una ceja.

—Bueno, tengo algunas canciones pero aun no son lanzadas como tal, Mi padre dice que debo esperar un poco y..—Suspira recordando sus palabras.—Bueno, le ayudo en lo que puedo.

—Tu padre es, ¿Odin manoban?—Cuestiona, en su voz yace el asco al nombrarlo. El joven asiente y siente deseos de devolver su desayuno. —Vaya eso es..

Sus palabras son interrumpidas por el sonido del teléfono del joven, así que le ve hacer una reverencia antes de disculparse para atender aquella llamada. Jennie solo pasea su mirada en aquel joven y no deja de plantearse aquella idea, incluso si muchas veces se ha negado en tener una relación con alguien, sabia que si iba tras aquel chico de aquella forma podía introducirse en aquella familia.

Y si bien lo sabia, Ella no era una chica poco atractiva, a decir verdad tenia un porte demasiado hermoso y cada facción de su rostro parecia a ver sido tallado por un Ángel, así que podía claramente tener a sus pies a cualquier hombre que se pusiera por delante.

Así que no había duda, esa era la idea.

Le mira regresar, disculpándose antes de tomar sus cosas para marcharse, contándole a la castaña qué su padre habia tenido una emergencia y que el tenia que acudir rapidamente, así que no obstante le pide su número y aquel joven se lo escribe en una de las servilletas y en cuestión de minutos se marcha.

Jennie sonríe, un tanto victoriosa por a ver podido tener un avance y aunque no es uno muy grande, esta segura de cuales serán sus movimientos apartir de ahora.

Ella tomaria su corazón y lo rompería.