PARARELL

Miedo a lo desconocido

Estoy tranquila porque Sehun me ha inyectado un calmante que hizo efecto al instante, no por ello me siento mejor en cuanto a este lugar extraño, mi hermano también me está inyectado algo con lo que se supone recobrare mi memoria, no se tal vez el verdadero sueño es lo que creo que soy y quizás este sí sea mi mundo.

—¿Cuánto tardaré en recuperar mi memoria?

—De uno a diez minutos. Tu pérdida de memoria es fascinante y preocupante, es un efecto secundario de la cura que vuelve a la cura inservible, lo siento por eso hermana.

—¿Por qué es fascinante? —No le encuentro nada de fascinante.

—Porque has olvidado todo, desde los objetos y su funcionamiento, hasta lo que existe.

—¿Quiénes son la mujer y la niña?

—Prefiero que lo recuerdes por ti misma, regreso en diez minutos.

Es evidente cómo evadió la respuesta y no lo entiendo, esa niña definitivamente no es mi hija, se supone aquí también existe Jessica y es mi esposa, no hay manera de que tenga una hija fuera del matrimonio, estoy segura que no le haría algo así a Jessica en ningún mundo.

Este es un lugar donde no existe el baño porque según Sehun no lo necesitamos, los humanos no tenemos intestinos, fue parte de la evolución, nos alimentamos por unas píldoras que aportan los nutrientes necesarios, eso dijo, y luego mencionó que metabolizamos y desechamos a través del sudor y del sexo, esa última parte no la entendí y no quiero entender nada.

Una parte de mí se mantiene negativa a que esto sea real, sé que ya no puede ser un sueño o una broma, pero no, es tan confuso.

Continúo esperando y esos recuerdos no vienen a mí, claro, porque no los hay, porque mis memorias son muy distintas, con Jessica por ejemplo, en los preparativos de nuestra boda, y aquí tuve una boda de la que nunca me voy a acordar.

¡La puerta se abre de pronto y es ella! ¡Mi Jessica! Estoy por saltar sobre ella con emoción cuando me percato de su semblante helado, está muy enojada.

—Jessi —Pronunció con duda.

—¡¿Por qué estas viva?! —¿Es que acaso escuche mal? Ella se acerca un poco más y su mirada de odio es para mí— Estaba segura que no despertarías, estaba feliz de que no lo hicieras, pero tenías que volver ¿Por qué simplemente no te moriste?

Me quedo muda, incrédula ante sus palabras y dolida, no será mi Jessica pero es idéntica a la que conozco, solo con cabello rubio, hasta se enoja igual pero conmigo nunca recibí una ira de esa manera.

—Eres una puta. —Es Sehun ¿Acaba de insultarla? —No le hagas caso hermana, solo te está provocando para que pase lo de la última vez.

—¿Qué pasó la última vez?

—¿Aun no recuerdas? Maldición, su pérdida de memoria no es temporal.

—Nadie ha perdido la memoria, no es posible. —Dice Jessica de mala gana.

—Es pésima fingiendo y hasta olvido a la que si viene a visitarla. —Le dice Sehun.

—No lo creo.

—¿Qué te hice para que me odies? —Fue una mala pregunta de mi parte ya que me da esa mirada helada y luego sale de la habitación— ¿Por qué me odia?

—Más tarde te lo explico.

—Quiero saberlo ahora.

—¿Y si se lo preguntas a ella?