Otra perspectiva

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Asistir a una gala más, además de vernos obligadas por mi posición jerárquica en este mundo, tres de mis trabajadores habían finalizado proyectos importantes, a los cuales al igual que a Jessica les pedí preparen sus discursos para presentarlos ellos mismo.

Aún es por la mañana y debido a que el evento es por la noche, es lo que menos nos preocupa, estamos teniendo actividad sexual porque así lo pidió mi amada esposa, ya puedo llamarla así a tan solo siete meses de conocernos aquí.

Es increíble cómo avanzan las cosas para nosotras, me he vuelto una adicta a ella y cómo no hacerlo si aparte de todas las cualidades físicas y mentales que tiene, el sexo aquí es tres veces más placentero que en el de la época donde provengo.

Allí estamos llegando al mismo tiempo, cosa que ya es sencilla de lograr para nosotras y a través de gemidos escandalosos que no me hubiera permitido antes.

—No te separes, permanece un rato. —Me pide y yo acato la orden pero me empujó hacia delante— Fany no te muevas. —Se queja porque aún esta sensible.

Nuestros sexos están unidos, literalmente lo están, lo que hace que las sensaciones se vuelvan más placenteras.

—Lo siento, te sientes muy bien. —Ya solo utilizo mi mano para acariciar su pierna, ella es la que esta recostada sobre la cama.

—Pensar que te asustaste la primera vez. —Ahora se burla de ella cada que puede.

—Te dije que en mi universo esto no ocurre, de hecho esta posición es muy incómoda para la mayoría y tiene un nombre de algo que ya no existe aquí.

—Qué lugar tan horrible del que provienes.

—Oye, tiene unas cuantas cosas buenas.

—¿Cómo cuáles?

Probablemente cualquier cosa que diga la podrá desacreditar en segundos, excepto alguien que es igual a ella.

—Pues tenía a mi propia Jessica. —La hago que suelte una carcajada.

—Mejor muévete. —Es ella quien se empuja.

—¿Otra vez? Tú no tienes límites, insaciable.

—Eres igual, la última antes de irnos. —Se sostiene de mis muslos y yo doy un empuje con fuerza provocándole un gemido.

—¿Rápido? ¿Duro? —Puedo ver sus mejillas rojas pero sonríe y dice ambas, no hay duda que Jessica es pervertida en cualquier lugar y eso me gusta.

Nuestra sesión se prolongó haciendo que fuéramos tarde, aún con ello Jessica me pidió que me adelantara cosa que se me hizo extraña, no quería llegar sola a la gala pero ella me explicó que tenía una sorpresa a darme, por lo que ya no proteste y me dirigí al lugar.

Esta vez elegí un vestido negro, lo que me gusta de este universo es que puedo tener la ropa que quiera, y con la que seleccionó podría ser una supermodelo, dejo mis fantasías porque he llegado.

Una vez dentro del lugar, la gente que me saludaba a mí pasó y no dejaba de preguntarme por Jessica, fue un fastidio, seguro que ya están murmurando que tengo problemas con ella y esas cosas.

—¿Y Jessica? —Otro más, este es Sehun por lo menos.

—Pidió que me adelantara, dijo que me iba a dar una sorpresa.

—Bien, ven por aquí, tengo que presentarte a gente nueva.

—¿Por qué me olvide de ellos o nueva de verdad?

—Nueva de verdad.

Y los siguientes minutos fueron los peores con personas que despiden falsedad por donde sea que se les mire, intensos al estar criticando a otros asistentes y aprovechados al querer sacarme información de mis proyectos o de si de verdad perdí la memoria, por suerte soy hábil para evadir y me aleje de ellos.

PARARELLWhere stories live. Discover now