Capítulo 1

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Un nuevo día comenzaba en la ciudad de Akatsuka, los jóvenes iban al colegio mientras los adultos trabajaban o hacían los deberes de la casa, todos tenían algo que hacer, aprovechando su día al máximo.

O al menos, casi todos.

-¡Agh! ¡Mis ojos!-

-¡¿Quién olvidó cerrar las persianas?!-

-¡QUEMA! ¡QUEMA!-

-¡Son las 11 de la mañana, levántense ya!-

-Good morni...-

-¡Cállate, quiero dormir!-

Los hijos del matrimonio Matsuno (aunque de mala gana) despertaron y entre quejas y reclamos bajaron a desayunar.
Todo seguía su curso, una vez acabaron de comer se dispusieron a subir a cambiarse y... quedarse sin hacer nada.

Siendo ese el plan original sino fuera por el mayor de los sextillizos, quien al poco rato se había aburrido, proponiendo que todos salieran a pasar un "momento de hermandad" a las apuestas de caballos.


******


-¡Vuelve aquí maldito idiota!-

-¡TRAIDOR, TRAIDOR!-

-¡Osomatsu!-

Ahora el mayor de los sextillizos escapaba de sus sádicos y adorables hermanitos, quienes, al ganar en las apuestas se habían visto abordados por el de mirada carmesí y siendo este un profesional en el arte de la estafa, les quitó todo lo que tenían, dando como resultado está rara pero cómica situación.

Ichimatsu al no tener la mejor condición se quedó atrás, siguiéndole Todomatsu ya que "no quería apestar su ropa a sudor"; mientras Choromatsu, Jyushimatsu y Karamatsu aún seguían al mayor, siendo el joven de poleron azul el más cercano a su escurridizo hermano mayor.

-Es... Escucha Karamatsu, si me dejas huir, niisan promete invitarte al restaurante de carne que tanto te gusta-

-...- Por un momento los ojos zafiro brillaron con entusiasmo, hasta que recordó un pequeño detalle. -¡Estarías pagando con mi dinero!-

-"Rayos"-

Todos comenzaban a cansarse y en un intento desesperado por perder a sus hermanos, Osomatsu se desvío a una calle poco transitada. El movimiento había sido tan repentino y veloz que obligó al resto a detenerse y buscarlo con la mirada.

Es una pena que Osomatsu haya tomado esa decisión, pues de haber estado un poco más alerta hubiera notado la sombra que venía asechándolo calles atrás, dirigiéndole una mirada de odio puro y una sonrisa que anhelaba solo una cosa.

Venganza...

HoneyWhere stories live. Discover now