Billdip- Ven a mi, mi querido Pinetree

CAP 14: Atracción

¡SIGO VIVA! ¡NO ME HE MUERTO!

Siento mucho la demora. He redactado este capítulo más largo como disculpa por la tardanza.

No me matéis porfa plis. :'v

Disfrutad del capítulo!

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Desde que habían salido de la habitación, Bill se había negado a soltar la mano que había agarrado la suya. Para el demonio la sensación de su piel contra la del de pelo castaño era completa y absolutamente placentera.

-Suéltame, ¡ya te dije que no quiero que me toques!- habló por fin Dipper forcejeando inútilmente contra la mano del mayor.

Para el desagrado de Dipper, Bill le dirigió una sonrisa burlona y seguir andando sin hacer caso de las protestas del menor.

Hijo de puta.

Continuaron en silencio por el largo y oscuro pasillo hasta una puerta enorme y llena de grabados que Dipper no entendió.

-Te enseñaré a entenderlos, para alguien como tú no será muy difícil- comentó el rubio al darse cuenta que Dipper observaba el relieve de la puerta con suma atención.

Aún así, Dipper puso cara de molestia. No negaría que sentía un hambre voraz de conocimiento hacia lo que parecía ser una lengua no conocida para él, pero recibir las enseñanzas de aquel que lo capturó y lo involucró en ese ritual en contra de su voluntad no sería algo que aceptaría. A pesar de todo Dipper aún tenía algo de orgullo.

Las puertas se abrieron dejando ver un comedor exageradamente grande y lujoso. El suelo estaba tapizado por una alfombra de color sangre con bordado en amarillo. Encima de este, en el centro de la estancia, una enorme mesa rectangular que tenía a su alrededor seis sillas tapizadas a cada lado, y en la cabecera, una silla que era bastante diferente. Era mucho más grande y alta que el resto de asientos, más parecía un trono que una silla. Dipper no tenía dudas de la persona que se iba a sentar ahí.

Pero lo que más impresionó a el castaño fue el magnífico ventanal que dejaba ver el cielo, ahora multicolor de Gravity Falls. Dipper casi inmediatamente fue corriendo hasta allí, y apoyando las manos en el cristal, observó asustado como había quedado el pueblo.

Desde donde veía, la mayor parte de las construcciones estaban derruidas o modificadas por la magia del raromagedon. Había demonios y criaturas por todas partes, todas bailaban o festejaban. Como si ya hubiesen ganado.

-¿Que te parece la fiesta? Antes era dentro del castillo, pero hacían tanto ruido que tuve que echarlos para que descansaras- Bill con una sonrisa y una copa de líquido de dudosa procedencia, lo observaba sentado en la cabecera de la mesa. Su porte era muy elegante, con la pierna derecha cruzada por encima de la otra y la espalda recta y recostada en el respaldo del asiento. Además descansaba la cabeza en el dorso de la mano mientras que con la otra giraba distraídamente la copa y de vez en cuando se la llevaba a los labios. Lo que le daba un toque bastante provocativo.

Dipper se giró un momento solo para enviarle una de esas miradas odiosas de las que Bill ya se estaba cansando.

-¡Como si tú tuvieses la capacidad de preocuparte por alguien!- le espetó sarcásticamente.

El Chiper suspiro cansado más no derrotado.

No dijo nada. Se levantó en completo silencio, dejó la copa en la mesa con sumo cuidado y camino hacia el castaño, el cual se puso inmediatamente alerta. Como un animal que detecta el peligro.

Bill se detuvo a un paso de Dipper y se le quedó mirando. Serio e inexpresivo. Eso a Dipper le aterró más que cualquier sonrisa macabra. Pasaron los segundos y ninguno se movió. Pasado ese tiempo Dipper bajó un poco la guardia pensando que el rubio no le haría nada.

Pero se equivocaba. Con gran velocidad estampó su mano con fuerza al lado del cristal, muy cerca de la cabeza de Dipper. Haciendo que este se asustara y retrocediera pegando su espalda al vidrio.

La diferencia de altura era bastante grande, quizás de cabeza y media. Eso lo hizo sentirse más intimidado, además de la cercanía del demonio rubio. Casi se tocaban sus narices, así que como reflejo, puso sus manos en el pecho de Bill.

-Me duele lo que dices Pinetree, ¿como sabes tú qué no estoy preocupado por tí?- preguntó con una sonrisa burlona.- Si te salve de ti familia. Si no lo hubiese hecho no estaría preocupado... Además tenemos un vínculo... Te sientes atraído a mí aunque no quieras.

-¡Deja de decir estupideces!- contraatacó furioso Dipper dándole un manotazo a la mano que, descaradamente se había posado en su barbilla y había subido hasta acariciar su mejilla.- Jamás estuve, estoy o estaré atraído por tí.

-Puede que yo diga estupideces, pero tú mientes. Aún recuerdo cuando todavía eras un crío y nos enfrentamos por primera vez. Me sorprendiste bastante. Pero lo que me divirtió más fue que después de ello, no paraste hasta conseguir información sobre mi. Estar obsesionado conmigo también es un tipo de atracción. ¿O me equivoco?

Dipper abrió la boca y la cerró. Bajó la cabeza pensativo. Es cierto que en algunos momentos estuvo totalmente obsesionado con conseguir más información sobre el demonio. Aceptaba que el tema le atraía de forma magnética. Dipper agitó la cabeza. Su "atracción", como la describía Bill, era simple curiosidad por saber y explorar un nuevo misterio. Nada más.

-Eres un ser que amenazó la mente de mi tío, simplemente estaban siendo precavido.

-Entonces, ¿estás completa y absolutamente seguro que mi ser no te atrae?

-Absolutamente- contestó Dipper convencido.

-Bueno... Pues déjame hacer que cambies de opinión.

El más alto cogió con fuerza la barbilla de el otro y estampó sus labios contra los del castaño.

¡¿Q-que demonios?!

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Me duelen los dedos :'v. Más os vale apreciar el capítulo XD.

Gracias por tener paciencia, os quiero 🥰

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