𝘚𝘵𝘶𝘱𝘪𝘥;: ʝʝƙ

chapter nine

Me desperté algo aturdida y con un terrible dolor de cuello, dios, dormir en el sofá es demasiado tortuoso. Me incorporé lentamente haciendo tronar todos mis huesos mientras movía mi cabeza en círculos para que dejase de dolerme tanto por haber dormido en una mala postura. Al terminar de hacer esos dolorosos movimientos y de haberme tallado los ojos, observé al individuo con una mandíbula perfectamente mordible, debajo de mis piernas y con el cuello en una posión, incluso peor que la mía. No me dí cuenta hasta unos instantes de que era Jung Kook, mis ojos se abrieron más de lo normal e inmediatamente quité los pies de encima de sus piernas, provocando que al moverme tan rápido y querer poner mis pies sobre el suelo cuanto antes, me dí con la pequeña mesa de café que teníamos delante. Chillaba sin emitir ningún sonido mientras me retorcía de dolor. Me arrepiento de haber comprado esa estúpida mesa.
Me levanté bien, menos mal, y me acerqué a la parte de atrás del sillón. Su cuello estaba en su total flexión, porque se le podía ver perfectamente el rostro boca abajo. Saqué mi móvil del bolsillo derecho de mi pantalón y miré que hora era. Las 21:57. Es muy tarde, ¿lo despierto para que se vaya, o le dejo quedarse a dormir en el sofá? Total, no me va a molestar, supongo. Volví a guardar mi teléfono y me acerque a uno de los sofás individuales para agarrar un cojín. Me aproximé a Jung Kook para cogerle la cabeza cuidadosamente para no despertarlo y ponerlo encima del cojín para que no tenga problemas de cuello como yo. Después sujeté sus piernas, quitándole los zapatos y subiéndolas al sofá, para que así pueda dormir cómodamente ya que puedo deducir que no le habré dejado moverse en ningún momento.  Me alejé de él y tomé rumbo a las escaleras, dios mio, Eun Jin estará muy hambriento, aceleré más mis pasos para llegar a su habitacíon. Abrí la puerta de golpe, pero este niño estaba totalmente dormido. Me acerqué a él para ver si había indicios de que hubiera llorado, pero ni rastro. Relajé mis músculos, pues tanta tensión había hecho que se me engarrotasen. Le desperté intentando ser lo más cuidadosa posible, porque este niño en el comportamiento a salido igual que su madre. Cada vez que le despierto cuando él esta aún dormido, me escupe. Si, si, me escupe en la cara literalmente. No se como un niño tan pequeño puede desarrollar tal habilidad en su corta edad.
Cuando ya estaba más o menos espabilado (despierto), lo agarré  y lo saqué de la cuna. Le estuve haciendo cariñitos para que no me quisiera matar por despertarlo y lo bajé para alimentarlo. Mientras le daba comida y este se la tragaba como si no hubiera probado bocado en su vida, sentí movimiento en la parte del salón. Supuse que era Jung Kook girando su cuerpo para cambiar de postura, pero después escuché pasos acercándose más a nostros dos. Mi cuerpo tenía una enorme bola de nervios, si no es Jung Kook porque esta durmiendo profundamente, ¿Quién es él sujeto que esta acercándose tan rápido a la cocina? Corrí al cajón de las sartenes y agarré una, nunca se sabía y además tenía ilusión de hacer eso como en la película de Rapunzel. Me aproximé lentamente a la puerta y me puse contra la pared de al lado, para estar preparada para intervenir en cualquier momento. Giré mi cabeza para observar a mi pequeño, el cuál estaba demasiado ocupado arrebañando todo rastro de comida que quedaba en su plato, que de que podrían estar apunto de matar a su madre, y no le culpo, es un simple bebé. Cuando escuche que la persona estaba por pasar por el umbral de la puerta, saqué todo mi cuerpo de la pared, cerré los ojos y levanté la satén gritando como en el oeste, para que esta acabase en la cabeza del individuo haciendolo gritar de dolor. Abrí lentamente mis ojos y de apoco bajar la sartén, para darme cuenta que la persona que yo creía por extraña, era Yoon Gi, espera ¿Yoon Gi?

-¿Yoon Gi?-hablé muy confusa- ¿Tú no estabas con tu ''amigo''?- hize comillas con los dedos, con aún la satén en mi mano

-¡Dios, que sartenes mas buenas hemos comprado no?-habló, ignorando completamente mi pregunta y sobandose la cabeza

-Responde niño-le pegué un leve toque en la cabeza con la satén

-Como tu has dicho estaba- hizo énfasisis en ''estaba'' mientras todavía se sobaba la parte superior de la cabeza- Todavía no se como has podido llegar hasta encima de mi cabeza con lo bajita que eres