Capitulo 26

916 79 3
                                    

Joaquín comenzó a despertar y a su mente vino el recuerdo de aquella noche que hizo el amor con Emilio. Sintió una mano rodeando su cuerpo, se dio la vuelta para encontrarse con la hermosa imagen de su novio ya despierto mientras lo miraba.
-Buenos días amor- dijo acariciando su rostro.
-Buenos días bonito- dijo Emilio sonriendo, pero en ese momento Joaquín se sentó de golpe-. ¿Qué pasa Joaquín?
-Creo que ya tienes que irte a casa, no vayas a meterte en problemas con tus padres porque no llegaste a dormir.
-Tranquilo mi amor, todo está bajo control. Anoche después de que te quedaste dormido les llame a mis padres para decirles que después del cine se nos ocurrió hacer una pijamada y me puse de acuerdo con los demás para que me cubrieran.
-Ay, de verdad te amo.
Joaquín se lanzó sobre los labios de Emilio haciendo que ambos cayeran nuevamente sobre el colchón.
-¿Cómo dormiste?- preguntó Joaquín juntando su rostro con el de su novio.
-De maravilla después de la hermosa noche que pasamos. La verdad si me sorprendiste.
-Lo hice porque te amo y quiero hacerte feliz.
-Tú ya me haces feliz y eres el amor de mi vida.
Pegaron sus frentes para darse un beso esquimal, sin duda este par estaban muy enamorados. (Casi siempre pongo ese tipo de besos en mis historias pero es que son mis favoritos porque son demasiado tiernos 😊)
-Te digo algo- dijo Emilio mirándolo enamorado.
-Dime- contestó Joaquín mirándolo de la misma manera.
-Me gustaría despertar de esta manera todos los días, contigo a mi lado y que lo primero que vea sea tu hermoso rostro.
-Te amo mi niño. Ya vamos a levantarnos para darnos un baño y desayunar.
Y eso hicieron los muchachos, se levantaron para entrar a la ducha juntos, obviamente no pudieron evitar darse sus buenos besos sin llegar a otra intención, solo disfrutar. Ya bañados y arreglados se fueron al comedor para desayunar junto con la familia de Joaquín.
-Buenos días- saludaron ambos.
-¡Hola tortolitos!- saludó Renata.
-¡Renata!- lo regañó Eli-. Sientense chicos, ahora les sirvo su desayuno.
El desayuno fue un momento único ya que compartían recuerdos para que Emilio conociera un poco más sobre esta familia, el rizado también contó anécdotas de él para que lo conocieran. Emilio por más que quería pasar un rato más con su novio no podia, pues ya tenía que regresar a casa. Se despidió de la familia de su novio y este lo acompañó a su auto.
-¿De verdad ya te tienes que ir?- preguntó Joaquín haciendo puchero.
-Si bonito, pero no te pongas así, ya sabes que mañana nos veremos en mi casa- dijo Emilio sonriendo-. Pero no dejaré de agradecerte por este mesniversario, de verdad gracias mi amor.
-No me agradezcas mi amor, es lo menos que puedo hacer para demostrarte lo mucho que te amo.
-Yo te amo más mi corazón.
Después de un momento más de besos fue momento de que Emilio se fuera.
-Ahora si me tengo que ir antes de que me meta en problemas- dijo Emilio.
-Si amor, nos vemos mañana- dijo Joaquín dándole un último beso-. Te amo.
-Yo más.
Emilio finalmente se fue y Joaquín entró a su casa. Ninguno de los dos olvidaría esa hermosa noche que tuvieron.

El Jardinero Where stories live. Discover now