Capitulo 27

910 76 4
                                    

Tiempo después...
Joaquín llegaba de trabajar, pero ese día se sentía más cansado que de costumbre así que se metió a bañar para relajarse un poco. Ya habían pasado dos meses desde que Emilio y él se entregaron al amor, cada día estaban más enamorados.
-Joaquín, la abuela quiere que ya bajemos a cenar- avisó Renata.
-Ya voy- dijo Joaquín.
Ambos salieron del cuarto para bajar al comedor, pero antes de bajar las escaleras Joaquín se tambaleó un poco pero Renata lo sostuvo.
-¿Estás bien?- preguntó la chica.
-Si Renata, solo fue un mareo- dijo Joaquín una vez que se le pasó el malestar.
Volvieron a retomar sus pasos hacia el comedor para cenar, pero nuevamente otro mareo se hizo presente solo que esta vez no se tambaleó.
-Joaquín, ¿seguro que estás bien?- volvió a preguntar Renata-. No es normal que te estés mareando mucho, ¿haz estado comiendo bien en el trabajo?
-Por supuesto Renata, ha de ser porque cargó muchas cosas y sobretodo por el calor que agarro- dijo Joaquín-. Pero ya estoy bien, vamos a cenar.
Los dos jóvenes llegaron finalmente al comedor y se sentaron a cenar. Eli llegó de trabajar y se sentó para cenar con su familia, obviamente no pudieron faltar las conversaciones.
-¿Y cómo van Emilio y tú?- preguntó Eli.
-Bien mami, cada día estoy más enamorado de él y nuestro amor se ha hecho más fuerte- dijo Joaquín sonriendo.
-¿Y tú Renata? ¿Algo que contar?
-De hecho si, después de un tiempo de conocernos... ¡Diego y yo ya somos novios!- dijo Renata emocionada.
-¡Lo sabía! Emilio y yo les decíamos que terminarían juntos.
-Eso es maravilloso hija, me alegra ver a mis dos hijos muy enamorados. Los amo hijos.
-Y nosotros a ti.
-Cuando inviten a sus novios a comer a la casa yo les prepararé una rica comida para que se sientan como en casa- dijo la abuelita.
-Gracias abuelita.
Todos terminaron de cenar y se fueron a sus habitaciones a dormir. Joaquín ya se sentía un poco mejor así que ya acostado decidió llamarle a Emilio para platicar un rato con él antes de dormir.
Llamada
-Hola bonito- contestó Emilio.
-¿Cómo sabías que era yo?- preguntó Joaquín con una pequeña risa.
-Te tengo registrado como “Mi chiquito bonito”, es obvio que iba a saber que eras tú. Pero ¿qué pasó amor? ¿Por qué me llamas a esta hora?
-No podía dormirme y pensé que volviendo a escucharte me podría relajar. No tiene mucho que nos vimos y ya te extraño.
-Yo igual amor, pero ya mañana te vuelvo a ver.
-Si. Oye, ¿ya supiste que Diego y mi hermana ya nos novios?
-¡¿De verdad?! Yo sabía que ellos dos iban a terminar juntos... ¿Joaquín? ¿Sigues ahí?
-Si, perdón Emilio solo se me nubló un poco la vista pero ya estoy bien. Lo que pasa es que me empezaron a dar mareos cuando llegué a mi casa.
-Ay mi amor, espero que no te vuelva a pasar, no quiero que te pase nada malo.
-Tranquilo amor, estoy bien. Creo que lo mejor será que ya me vaya a dormir.
-Si amor, descansa. Te veo mañana y si te sigues sintiendo mal me avisas para llevarte al doctor.
-Gracias por preocuparte amor. Te amo, nos vemos mañana.
-Dulces sueños bonito.
Fin de la llamada
Joaquín finalmente se durmió con una sonrisa en su rostro sabiendo lo mucho que era importante para Emilio. Aunque ahora las vidas de ambos estaba por cambiar en un giro de 360°.

El Jardinero Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ