Black (Ross Lynch) (Hot)

Capítulo 51

El sonido de la lluvia me despierta.
Mis ojos tratan de ajustarse a la luz de la chimenea que sigue encendida. Con los ojos entrecerrados veo la hora en el  reloj de la mesa de al lado.
3:45 am.
No hace mucho que nos fuimos a dormir.
Y puedo sentirlo en los músculos tensos de mi cuerpo. Sobre todo los de mi abdomen que están ligeramente adoloridos por la fuerza.

Miro debajo de las sábanas que me cubren. Estoy erecto.
Como si lo de anoche no hubiera sido suficiente. Nunca es suficiente con ella.

Observo a mi esposa durmiendo a mi lado, cansada luego de haberse corrido 5 veces durante la noche.
Ella no había tenido más fuerza para levantarse, asi que yo la limpié con una toalla, mientras ella se quedaba dormida.
Mis pensamientos me hacen mirar su cuerpo, no está cubierto por las sábanas. Su pecho sube y baja de acuerdo con  su tranquila respiración. Sonrío recordando como sus tetas se movían con cada embestida que le daba.

De pronto me sobresalto cuando _________ se mueve sin abrir los ojos. Se lame los labios y mueve las caderas.

-Ross...- dice en su sueño.

Contengo mi respiración para que ningún ruido la perturbe.  Y luego se que estoy seguro que está dormida, estiro los brazos para tocar sus pezones que al instante se ponen duros con mi tacto.
Está soñando conmigo.
Me acerco a ella hasta hundir la nariz en su cabello.
Mi esposa.
Ella despierta todos mis sentidos.
Le dejo varios besos en la mejilla y acaricio su rostro.
Ella no se despierta. La miro fascinado.

¿Qué está soñando?
Debe ser bueno por que sigue durmiendo y al sentir mi tacto no ha protestado.
Recuerdo todos los sueños eróticos que ella me ha provocado antes. Pero yo era un hombre con suerte que, luego de soñar con ella, despertaba para que ella, con sus destreza sexual, supere el sueño que acababa de tener.

Con cuidado me pongo encima de ella. La luz de la chimenea la hace ver más morena y eso me gusta.

Desciendo por su cuerpo y con cuidado posiciono sus piernas a cada lado de mi rostro. Ella está húmeda. El sueño que está teniendo debe estar bastante bueno.

Empiezo a dejarle besos ahí abajo y no aparto los ojos de su rostro para saber cuando se despierta. Ella sigue descansando. Entonces deslizo varias veces mi lengua desde la base hasta su clítoris y luego con movimientos circulares empiezo a jugar con este. Su respiración se acelera pero aún tiene los ojos cerrados.

Continúo trazando círculos con mi lengua y luego lo chupo con delicadeza.

_________ se despierta sobresaltada.

-Aquí estoy, mi amor.- le digo, y le pongo una mano en el vientre. Ella me encuentra con la mirada, tiene los labios separados y respira con cierta dificultad. Observa su cuerpo desnudo y lo que yo estoy haciéndole- ¿Quieres que me detenga?

-No...- responde en casi un susurro.- Sigue, por favor

Abre más las piernas para darme un mejor acceso y yo me acomodo entre ellas. Así me gusta tenerla, abierta para mi.

Ella me mira mientras yo sigo estimulando su clítoris. Con su mano acaricia mi cabello y me atrae más cerca a ella.

-Mmmmm.- digo yo y ella gime ante la vibración de mis labios sobre ella. Le gusta. Lo hago de nuevo.

-Si...- dice ella antes de echar la cabeza hacia atrás. Empieza a mover las caderas en busca de más.- ¿Puedes usar tus dedos?

Mi polla da un salto. Le gusta cuando ella me habla.

-¿Dónde?- pregunto.

-Dentro de mi.- responde deseosa.

Sonrío.