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A la mañana siguiente Marco se despertó con el sonido de su teléfono celular, se removió entre las sábanas y observó la figura de Belle abrazada a él.

- ¿Quien demonios es a esta hora? - miro de reojo el reloj colgado en la pared. Eran las cuatro de la madrugada.

El teléfono volvió a sonar una vez más y no tuvo otra opción que recibir la llamada.

- Ciao - respondió mientras se levantaba desnudo de la cama hasta a un lado la ventana.

- ¿Don Marco? - escuchó una voz femenina del otro lado.

- ¿Con quién estoy hablando? - pregunto mientras se asomaba levemente por la cortina de la ventana y veía a sus hombres alineados a la perfección cuidando la entrada de la casa.

- Soy...Soy Colette - susurro la mujer.

- No sé quienes eres.

- Soy la mujer de Niccolo.

- Ya me acuerdo de ti - respondió al recordar haberla visto aquella vez en la Iglesia en el funeral de Belle-. ¿Porque la mujer de Niccolo me está llamando tan temprano?- se rasco la nuca girando su vista está vez a su esposa.

- Niccolo.... Él es un buen hombre aunque no lo parezca, sólo hace lo que cree es lo mejor para su hija.

- Escuche segnorina, Niccolo es el peor ser que conozco sobre la tierra y le he dejado claras las cosas, no puede acercarse más a mi mujer.

- La esta pasando muy mal, sólo quiere estar cerca de su nieto, cuidarlo y... Darle quizás ese amor que antes no pudo darle.

Marco soltó una risa, le parecía increíble la ingenuidad de la peli roja.

- Eres muy ingenua, Niccolo quería llevarse a mi hijo para convertirlo en su heredero.

- ¿Qué? Eso no es cierto, Niccolo no haría eso...

- Pues lo hizo. ¿Porque no le preguntas tu misma? Seguro te llevas una sorpresa o quizás sólo te mienta al igual que a Belle.

- Don Marco, per favore... olviden la idea de esa pelea entre la Santa Corona y la Ndrangheta. No quiero que mi bebé crezca sin su padre.

- Eso no está en mis manos cara, debería colgar,suenas algo alterada.

- Prometo que lo convencere de que cambie su actitud, pero le suplico dejen esto de lado, se marcha por las noches y sólo regresa en las madrugadas, hay sujetos que están detrás de la Santa Corona y temo lo peor para él.

- Lo siento mucho, más que estés embarazada y pasándolo sola, pero no puedo hacer nada, ese es el hombre al que escogiste - respondió colgando la llamada.

El italiano arrojó a un lado el movil, Niccolo parecía estar acostumbrado a cometer error tras error.

- ¿Quien era? - escuchó la voz de Belle sacarlo de sus pensamientos.

- La mujer de tu padre - respondió el italiano acercándose de nuevo a la cama.

- ¿Él está bien? - pregunto angustiada levantandose de la cama.

- Tranquila... Ese hombre tiene más vidas que un gato.

- ¿Entonces cuál ha sido el motivo de su llamada?

- Quería tener una tregua para que me olvidará de nuestra discordia.

- ¿Que le has dicho?

- Le he respondido que no lo haré.

- Marco... Esa mujer esta embarazada,debió sentirse atemorizada para llamar tan temprano.

El mafioso se tumbó a un lado de la cama y cruzó sus brazos detrás de su cabeza.

Perfecta Oscuridad  (No.2 de la Trilogia Peligroso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora