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A pesar de lo que había dicho Leandro acerca de esperar noticias de Marco, Belle tomó el primer vuelo de regreso a Calabria.

Nerviosa jugaba con la argolla de matrimonio sin despegar la vista de su teléfono móvil.

Espero estar un poco mas tranquila cuando el auto se detuvo en la casa pero no fue así.

- Señora... - dijo asombrado Basilio por su sorpresiva aparición, se hizo  un lado y la vio luego pasar a toda prisa rumbo a las escaleras.

- Basilio, ¿Donde esta Marco? ¿Donde esta Lucca? - pregunto angustiada.

Basilio se quedó en silencio ni él mismo sabía en donde se encontraba su jefe.

- Lucca... - susurro ella al ver a su hijo dormido en la cuna-. Amore estas bien - dejo escapar las lágrimas mientras lo arrullaba en sus brazos.

- Encontramos al bebé en el auto, pero no habia señales de Don Marco - respondió Basilio.

- ¿Enviaste a los hombres a que buscaran?

- No - negó con la cabeza el hombre.

- ¿Pero que me estás diciendo Basilio?

- Tendremos noticias de él,conoce a Don Marco, no dejaria que nadie lo buscará, prefiriria morir antes de que lo salven.

- Conozco a mi marido, y sé que jamás me dejaría sola, o se iría sin decirme lo que pasa. Le ha sucedido algo.

- Señora Belle, escuche la orden ae ocupará...

- ¿La orden? ¡La maldita orden ha puesto a mi familia en medio de una guerra de dos mafias!. Basilio confiar en la orden es como lanzarse a un laberinto sin salida. Me encargaré de buscar a Marco por mi cuenta, así implique usar a los hombres de mi padre para su busqueda - dijo con determinación mientras devolvía a su hijo a la cuna.

- Me temo que no podre dejarla hacer eso - respondió el jefe de seguridad -. Don Marco ha sido claro en brindarle seguridad, ¿Que le voy a decir, si no la ve en casa? Si desaparece y él regresa va a volverse loco.

Belle suspiro y se quedo en una de las  esquinas de la cama.

¿Quién estaba realmente de todo? ¿Donde estaba su marido? Esperaría a que regresara o si no ella tomaría cartas en el asunto.

(***)

Un golpe lo hizo quejarse de dolor mientras se levantaba del suelo.

- ¿Que le sucede Don Marco?Usted no es de los que se deja golpear sin oponer resistencia

Marco escupió sangre al suelo y luego se limpio con la muñeca la boca.

- Pequeño idiota - susurro sonriendo.

Tenía un plan, sabía perfectamente como operaba la Santa corona y sus enemigos en el sur de Italia, oponer resistencia no lo llevaria mas que a la muerte, sabía como jugar su mismo juego.

- ¿Es cierto? - pregunto el hombre haciéndose a un lado del italiano-.  ¿Es eso cierto de que enloqueciste por una mujer? Todo el mundo en italia habla sobre su historia de amor con la novicia.

- ¡Vuelves a mencionar a mi esposa y recibiras un disparo que te arranque la lengua! - gruño furioso en el suelo.

- Parece que si tienes un punto que alimente tu odio - lo dijo con sorna-. ¿Pagaste por ella? ¿La llevaste a tu casa y después....

- ¡Cállate la maldita boca Angelo! - le grito su padre. Un viejo mafioso siciliano retirado hace algunos años-. No tienes ni la minima idea de como sacarle información a un hombre de la mafia Calabresa, menos a Don Velentiniani.

Perfecta Oscuridad  (No.2 de la Trilogia Peligroso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora