Hay días en que nada te quita la sonrisa del rostro, diría mi prima "pareces pinche sol de verano", y otros en que simplemente lo mejor que ves para hacer, es agarrar una flor y tragarte las espinas. ¿No tan extremo? Tal vez, pero a todos nos pasa.
Y es difícil salir del hoyo, ¡No te daré la clave, si es lo que esperas! Yo tampoco sé salir de aquí. Así que vivir también es muerte, cuando los días solo pasan y pasan, cuando estás triste, solo, con mala compañía, cuando no te encuentras, cuando te pierdes y cuando no sabes quién eres; a veces, el no matarte es tu logro del día, aunque para otros hacerlo lo hubiera sido.
Respirar, escribir, llorar, beber algo y dormir suele ser un intento de solución pero, ¿Qué se hace cuando no es suficiente? De eso aún no soy consciente.
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Historias De Un Corazón Fallido
RandomUn espacio donde puedo escribir mi historia, aún cuando nadie la lee.