Racing Drivers Gay Shit

What happens when you're an F1 driver (#2)

Agustín y Facundo se encontraban tomando mate en la habitación del primero. Era su penúltimo día en Abu Dhabi luego de la última carrera. Todos allí tenían una semana de vacaciones antes de volver a sus casas para las fiestas. Luego de los eventos de la despedida, nadie había dicho algo al respecto, solo actuaban como si nada hubiera pasado. O eso quería creer Agustín. Pero el hecho de que el día anterior también había invitado a su amigo a pasar el rato y este lo postergó porque tenia un compromiso importante —Que terminó siendo ir a beber a la habitación del piloto español con el que se había besado—. Le inquietaba, y quería saber mas sobre ellos

—Se ve que forjaste un vínculo con varios rivales.

—Si, Lando, Pierre y Seb son geniales.

—Me alegro que tengas amigos. En mi primer año fue más dificil la aceptación de los muchachos, especialmente con Chili, digo. No lo mencionaste pero te tomó mucho cariño.

—Si, igual él es así con todos.

El rubio suspiró y dejó el mate a un lado.

—Nah, no te hagas el boludo.

El otro entendió para que lado iba y se puso a la defensiva.

—Bueno bueno, vos tampoco. Que Leclerc te viene mirando el culo ese gigante que tenés desde que empezó la temporada.

—Si... pero a mi no me comieron la boca de un beso.

Se levantó de su silla y acercó con rabia. El otro también se puso a su altura.

—Era un puto juego!

—Y parece que lo disfrutaste mucho ese jueguito.

—algún problema con eso?

—Decime vos! Que metiste a Charles en el medio.

— Te molesta que hable de tu noviecito.

—El único con noviecito sos vos, lo dejaste muy en claro ayer que me plantaste por irte con él.

A este punto, ambos estaban demasiado cerca mirándose con incomodidad. sin saberlo, ambos querian dejar de discutir y abrazarse fuerte. Pero los fuertes celos de uno y otro dominaban su pensamiento.

Facundo se alejó y se fue dando un portazo. No comprendía que le pasaba a su amigo y compatriota. Estaban perfectamente bien, y ese estupido juego creó cierta tensión entre ellos. Quizá era homofobia, o quizá le tomó por sorpresa. De todos modos, solo sabia una cosa: jamás pasaría nada entre ellos, y deberia resignarse.

Por otra parte, Carlos que pasaba por ahi escuchó parte de la discusión y vio al piloto de Renault salir muy alterado. Decidió preguntarle si estaba todo bien, pero este disintió con la cabeza y se fue al balcón a tomar aire. Entonces lo siguió y se puso al lado, esperando que quiera hablar.

—Hey Chili.

—Que pasa, amigo Facu?

—Que deberia hacer si me gusta un tipo con el que me llevo bien y no quiero arruinarlo?

Carlos se puso tenso. ¿Y si el beso del otro día había hecho que el argentino se confundiera?¿Por su culpa discutió con el otro?

—Em... ¿Tu lo dices por un piloto, por alguien de aquí?

—Quizá... Bueno sí.

Mierda.

—Eh... Yo...

—Olvidalo. No importa. Nos vemos mañana.

Entonces se quedó pensando... Debía intentar solucionar las cosas. Quizá hablar con Agus, y explicarle que el beso fue su culpa. Se acercó a la habitación y golpeó.