NIRELLA

Capítulo 30. Delirio

Nirella se quedó mirando a Jonas como si él estuviera delirando y le pregunto.__ ¿Estás bien?

__ Si.

Ella se acercó a él, tocó su frente para comprobar que no tuviera fiebre y él le dijo.__ Estoy bien.

__ Creó que ese golpe en tu cabeza te ha afectado más de lo que creía, o de lo contrario no estarías diciendo tantas tonterías, lo mejor será que te vayas a la cama otra vez.

__ No estoy diciendo tonterías.

__ Claro que si, yo jamás te he importado en lo más mínimo y ahora dices que quieres conocerme mejor, ¡no me lo creó!, o estás tramando algo o está delirando, una de dos.

__ No es ni lo uno ni lo otro, solo me he dado cuenta que siempre te he juzgado mal.

__ Ya, pues no te creó, además no tienes que hacerlo ya que dentro de poco te irás de aquí.

__ No quiero que me odies.

Kailed entró a la cocina medió dormido, abrazo al pierna de Nirella.

__ Kai, ¿Qué haces despierto tan temprano?

__ Quiero estar con mami.

Nirella lo tomó en brazos, él se recostó en su hombro.__ Aún sigues medió dormido deberías volver a la cama.

Kai negó con la cabeza, y ella le dijo.
__ Aún no he terminado de preparar el desayuno, te quedarías en la silla.

Kai rodeó el cuello de Nirella con sus pequeños brazos y volvió a negarse.

Ella suspiró, sabía que cuándo Kai se ponía mimado no podía despegárselo hasta que estuviera completamente despierto.

__ ¿Puedo ayudarte con Kai si quieres?. Le dijo Jonas.

A Nirella no le hacía gracias que Jonas cargará a su hijo en brazos, pero como ese día tenía muchas cosas que hacer aceptó su ayuda y le pasó a Kai.

Él se acomodó en los brazos de Jonas perezoso y Nirella continuó haciendo el desayuno.

Jonas pasó su mano por los suaves cabellos de Kai y dijo.__ Es un niño encantador.

__ Si lo es.

__ El aún es pequeño, quizá necesité aún padre, si quieres lo busco por ti cuando vuelva al imperio.

__ No.

Negó Nirella.

__ No lo necesito así estamos bien.

__ Está bien, no te alteres.

Mientras Nirella terminaba el desayuno, Jonas estaba de pie junto a ella cargando al niño en brazos y ella le dijo.__ Deberías sentarte, Kai pesa un poco, en tu condición no es bueno que te canses.

__ ¿Estás preocupada por mi?

__ Si, entré más tardes en curarte más tiempo tardarás en irte, tus guardias deben de estar buscándote, si no te encuentran podrían irse.

__ No lo harán, hasta que ellos no me encuentren no se irán.

__ Quizá piensen que estás muerto.

__ Si no encuentran mi cuerpo ellos jamás me darían por muerto.

__ Parece que confías mucho en tus guardias.

__ Ellos son muy leales.

Nirella recordó como los guardias de Jonas siempre le impedían verlo cuando ella había sido su esposa y como la habían encerrado en su habitación el día de la ceremonia de coronación, por más que ella había gritado y golpeado la puerta para que la dejarán salir ellos la había ignorado por completo.

__ Lo sé...

Nirella había puesto una expresión de tristeza en su rostro al recordar ese amargo día.

Jonas iba a decir algo cuando Almira entró en la cocina con varias hierbas y las puso sobre la mesa.__ Buenos días.

__ Buenos días Almira, como te sientes hoy.

__ Aún me duele la espalda, le contesto, pero supongo que no hay nada que hacer, me estoy volviendo vieja.

Almira apartó una silla, se sentó y comenzó a seleccionar las hierbas.

La anciana veía a Jonas de reojo que cargaba a Jonas en brazos, y ella pensó.__ Este hombre en verdad es tanto si aún no se ha dado cuenta que Kai es su hijo, son exactamente iguales.

La mirada intensa de Almira puso a Jonas un poco nervioso, Kai se acomodó en su hombro, sus suaves cabellos acariciaron su mejilla, él estaba durmiendo plácidamente entré sus brazos y pensó que debía ser lindo tener un hijo.

Cuando Nirella término de preparar el desayuno se acercó a Kai y le dijo.
__ Cariño el desayuno está listo.

Kai se pasó a los brazos de su madre aún medio dormido y ella terminó despertarlo. Mientras desayunaban Almira le dijo a Nirella.

__ Podrías ir al río a por hierbas de Aren, las necesito para tratar mi dolor de espalda.

__ Iré después del desayuno.

__ Gracias, y ten cuidado.

__ Si.

Cuando terminaron de desayunar Nirella recogió la mesa y lavo los platos, Almira llevó a Kai al huerto y Jonás y se quedó a solas con Nirella.

__ ¿Vas a dónde me encontraste?

__ Si, estaba buscado hierbas para Almira cerca del río cuando te salve.

__ ¿Te puedo acompañar?

__ ¿Para qué?

__ Quiero ver si mis guardias me están buscando por ahí.

__ Lo dudo, ese río hace muchas curvas y desvíos, no es fácil ir por toda la orilla del río, por eso no te pudieron encontrar.

__ Aún así me gustaría poder ir contigo, ¿Puedo?

__ Está bien, pero si intentas hacer algo raro te dejaré ahí tirado.

__ Ya te he dicho que no te haré nada.

__ No creo en tus palabras, estás advertido.

Cuando hubo terminado de limpiar fue a buscar a Almira y le dijo.__ Iré a buscar las hierbas ahora, te encargó a Kai.

__ Si ve tranquila.

Nirella volvió a dónde estaba Jonas y le dijo.__ Andando.