NIRELLA

Capítulo 39. Sueño

Habían pasado varios días desde la partida de Jonas, el otoño ya había dado inicio, las hojas de los árboles cambiaron su color verde por tonos ocres y marrones, las hojas secas caían al suelo ayudadas por el viento que sopla con mayor fuerza,
y el clima se había vuelto frío, Nirella estaba trabajando en el huerto mientras Kai alimentaba a las gallinas , Almira le preguntó.

__ ¿Te arrepientes de no haberle dicho a ese hombre que Kai es su hijo?

__ No.

__ ¿Entonces porque parece que estuvieras triste por haberlo dejado ir?

__ Claro que no, me siento aliviada de que se haya ido, el tiempo que estuvo aquí temía qué se diera cuenta qué Kai es su hijo.

__ Tienes suerte de que ese hombre sea tan despistado, cualquiera con dos dedos de frente se habría dado cuenta que ese niño es una copia exacta de él.

__ Por suerte no se dio cuenta o no quiso hacerlo, no importa, él ya se ha ido y no volveremos a verlo nunca más.

__ ¿ Algún día le contaras a Kai quién es su padre?

__ Quizá algún día cuándo él sea adulto se lo diga, ahora él es aún muy pequeño no quiero hablarle de eso.

Jonas se quedó pensando en que hacer durante toda la tarde y se saltó él almuerzo, olvidando que le había prometido a Alina que comería con ella.

Alina fue a su oficina enfadada por haber sido plantada y le dijo.__ Me has dejado esperándote para comer, ¿Por qué no me has avisado que no vendrías?

Jonas se había olvidado de Alina por completo, en su mente solo rodaban Nirella y Kai.

__ Lo siento, se disculpó, estaba distraído y se me ha olvidado avisarte que no iría.

Alina se acercó a Jonas y le dijo.__ Estás actuado raro desde que volviste de Dreslon, ahora casi nunca nos vemos y ni siquiera haces el esfuerzo de cumplir tus promesas, ¿Qué pasa?

Jonas se dio cuenta que inconscientemente estaba haciendo lo mismo que le había hecho ha Nirella, y le dijo.__ Lo siento, he tenido muchas cosas en las que pensar, lamento haberte descuidado.

__ Se que eres un hombre ocupado, eres el emperador, pero me gustaría que me avisarás cuando no puedas asistir a una cita, y no te saltes las comidas eso no es bueno.

__ Lo sé, intentaré corregirme.

Alina rodeó el escritorio de Jonas y se acercó hasta quedar casi frente a él, tomó su rostro con sus delicadas y pequeñas manos, bajó su rostro y lo besó.

Jonas correspondió a su beso, pero no sintió nada, su corazón no latía con fuerza ni sentía deseó de continuar besándola, como le había pasado con Nirella. Al separar sus bocas Jonas le dijo.

__ Alina, aún no puedo romper mi matrimonio con Nirella, no me puedo casar contigo.

__ Se que hasta que no la encuentres y hagan la ceremonia de separación aún no podemos casarnos, pero ya te lo había dicho antes seré paciente, entiendo que eso no sea tu culpa.

Jonas no sabía si contarle Alina que el ya había encontrado a Nirella y que ella tenía un hijo suyo. Él miró Alina, ella lo había esperado durante varios años pacientemente a que él se separara de Nirella y la convirtiera en su esposa y pensó que no era justo para ella contarle que tenía un hijo o por lo menos no hasta que estuviera completamente seguro de lo que haría.

Pasaron varios días en los que Jonas seguía sin poder olvidarse de Kai y de Nirella, incluso en él tiempo que pasaba con Alina siempre se encontraba evocando los recuerdos que había hecho los días que había estado con ellos.

Recordaba la vez que había calmado al niño durante una tormenta, la vez que lo había cargado en brazos medió dormido; y por más que intentaba olvidarse de ellos tal y como se lo había dicho Andrew y dejarlos vivir una vida tranquila, él añoraba volver a verlos, volver abrazar a su hijo y contarle que él era su padre, añoraba poder volver abrazar una ves a Nirella, sentir el aroma a flores silvestres que provenía de su cuerpo, deseo poder volver hacerla suya una vez más.

Jonas había soñado con Nirella esa noche, soñó qué ella volvía hacer su esposa, la soñó caminado por el jardín por los pasillos del palacio tomada de la mano de Kai, soñó qué compartía las comidas como una familia feliz todos juntos, y que compartía habitación con ella, que tocaba cada parte de su cuerpo y la besaba sin descanso, el sueño había sido tan vivido que al despertarse Jonas se preguntó si era real, buscó a Nirella en su habitación y al encontrarse solo se dio cuenta que no era más que un sueño.

Jonas se había excitado al soñar haciendo el amor con Nirella, él tenía una erección, se levantó de la cama y fue al cuarto de baño a encargarse de su miembro endurecido y pensó no puedo continuar así, no puedo olvidarme de ellos, necesito ir a buscarlos.