Capítulo XIV

41 7 14
                                    

Hola hola 👋🏻
Espero estén bien y a salvo en sus hogares. Me disculpo por tardarme tanto en actualizar y se que a pesar de todo lo que he pasado no existen excusas para hacerlos esperar. Pero en fin, fueron asuntos que escaparon de mis manos.
Espero me disculpen y puedan disfrutar al máximo este capítulo que me costó una eternidad escribir.
Los quiero mucho, besos y abrazos 🤗

Leia

La magnificencia de todo lo que había ocurrido entre nosotros dos aún seguía fresca e intacta en mi memoria. No podía creer todo lo que había pasado, y no podía prestarle la atención debida a éste sujeto. El agente especial Creed hablaba y hablaba sobre Jayden, y yo no sabía cuánto tiempo más podría contener a mi acongojado corazón dentro de mi caja torácica.

El agente me escudriñaba con la mirada como si atravesara mi alma sacando a flote todos los secretos que he descubierto hace unos días. Sé qué hay muchas cosas más ocultas, pero no estoy segura de querer descubrirlas. La única idea que podía cruzar por mi mente era proteger a Amber.

Los inquisitivos ojos del agente me incomodaban, me ponían más nerviosa de lo que ya estaba y sé que él podía notarlo :— ¿No sabe nada sobre eso? — la voz áspera del sujeto me trajo devuelta de mis más profundos pensamientos.

— Como le había dicho, apenas lo conocía, no logramos compartir demasiado y desde la agresión que recibí de su parte, ya no quise saber de él. — reiteré intentando contener el nerviosismo que se filtraba por mis venas acelerando los latidos de mi corazón.

— Entiendo señorita, esto es un interrogatorio informal así que puede estar tranquila, solo busco información sobre el desaparecido. — dijo intentando tranquilizarme, pero era algo difícil de conseguir porque una loca idea había cruzado mi mente, ¿y si alguno de mis conocidos rusos ha tenido algo ver con esa desaparición? — Dígame, ¿recuerda algo extraño o algo que pueda servirnos para esta investigación? — indagó un poco más clavando aún más esos ojos en mí como si intentara atravesarme y llegar hasta mis más profundos pensamientos para así descubrir cada uno de mis secretos.

— La verdad yo no lo conocía muy bien, si tenía asuntos con la mafia rusa no me enteré de nada. Y mis recuerdos de nuestra primera cita son muy vagos, casi no recuerdo nada. — confesé, traté de parecer lo más honesta y segura posible de mis palabras. Intenté convencerme a mi misma de que no recordaba nada, de que no había descubierto nada.

— Muy bien señorita, no pretendo robarle un segundo más de su tiempo. — dijo incorporándose precisamente y se acomodó la chaqueta, yo lo imité incorporándome también, una extraña reacción de su parte — Le dejaré mi tarjeta con mi número telefónico personal, en caso de que recuerde algún detalle sobre aquella noche que resulte ser relevante para el caso, por favor no dude en contactarme. — solicitó entregándome un trozo de papel con su número escrito al dorso. La tomé y luego lo miré fijamente y en su rostro algo había cambiado, parecía haber obtenido exactamente lo que él estaba buscando. Su expresión hizo que algo se estrujara dentro mío, activando mis pobres alarmas.

— Claro, de eso no tenga la menor duda. —agregué cogiendo la tarjeta y dedicándole una sonrisa de boca cerrada. Más falsa que la suya.

Él se encaminó hacia la puerta, la abrió y yo aliviada creyendo que ya se iba, nuevamente él se detuvo —: Y una última cosa señorita Hawk.. — interrumpió volteándose hacia mí, mientras yo contenía mi respiración como si de esa manera impediría que todos mis miedos salieran a flote.

PELIGROSA AMISTAD © Where stories live. Discover now