𝑫𝒊𝒆𝒄𝒊𝒏𝒖𝒆𝒗𝒆

1.5K 97 5
                                    

Era el siglo XV, lo que les conté en casa era verdad excepto unas cosas..

–¿Qué cosas?

–¡¿Por que siempre me interrumpes?!

Si, aquella noche estaba buscando un refugio pero no solo por la tormenta, esa noche huí de mi casa, más bien del castillo de mi familia, era una familia de vampiros hasta yo. Pero no podría decirle a nadie podría morir.

–¿No que eras una campesina?

–Callate, Kaleb.

–Hazle caso a tu novio.

Esa noche llegué a la gran mansión Black, no llegué ahí por azares del destino, sabía que era la familia más poderosa. De ese pueblo claro, llegué diciéndole a tu bisabuelo que no tenía dónde quedarme que me dejara quedarme. Aceptó, ahí conocí a tu bisabuela y a tu abuelo cuando aún era bebé en el vientre. Kai Black, dejo quedarme a vivir en su mansión. A cambió yo ayudaría a su esposa con su bebé, después de un año viviendo ahí. Decidió hacer una reunión con hombres poderosos, pues íbamos a destruir el reinado de el conde Drácula. Llevábamos meses planeando, desde que un viejo amigo de Kai, no regresó del castillo, así como solían hacer todos los que eran "peligrosos" para su reino.

Entre los 30 hombres que llamó tu bisabuelo..había uno que resaltaba, el no pintaba nada ahí.

Su nombre era Jack Conor, un chico de ojos verdes como los de Zed y un cabello blanco tirando a café.

–¿Era tu pareja? –preguntó.

–Si.

Conor, era amable, compresivo, humilde y honesto. Algo que yo nunca seré.

–Te entiendo.

Y tiene razón, Kaleb siempre será todo lo que Zed nunca podrá ser y viceversa.

Desde que nos vimos, el empezó a hablar conmigo y decirme cosas bonitas, yo pensé que era un gilipollas y lo era. Habíamos planeado la noche del ataque con mucha preocupación para que ninguno muriese pues, aún que yo no lo admitiese ambos estábamos enamorados, el me había confesado que era un lobo. Esa noche el idiota quiso venir conmigo por la puerta de atrás, así que lo hizo, todos estábamos peleando e llevábamos la ventaja. Drácula aprovechó y me disparó. El se atravesó.

–Sus últimas palabras fueron.. "Nos volveremos a ver, te amo"

Nuestros rivales habían aprovechado ese momento para asesinar a nuestros hombres, era la única chica ahí. Al final solo quedábamos los 3, Kai Drácula y yo.
Ya no me importaba si tenía que morir así que quise sacrificarme por tu bisabuelo, pero el me empujó, el conde aprovechó nuestra pequeña pelea para clavarle una daga a Kai. Con dolor de haber perdido al amor de mi vida y a un gran amigo, le clavé esa estaca. Recibiendo la maldición que tenía Drácula, ya era una vampira pero no era una demonio. Mi piel empezó a quemar y sentía como mi cráneo se estaba rompiendo y como salieron dos pequeños cuernos negros. Me había convertido en un monstruo.

¡¿Eres Un Alfa?! © [BLACKVERSE #1] ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora