Serena y Blanca hablaban cuando ocurrió. Aparecieron de la nada. Peter envuelto en humo, Aurora con sus caramelos en los bosillos y R con su larga trenza despeinada. Ojos inquietos se encontraron. Recuerdos confusos se amontonaban en sus conciencias. Aurora fue la primera en dar el paso.
—¿Quiénes sois? —dijo con una mirada desafiante— ¿Cómo he llegado aquí?
—Te podría preguntar lo mismo, —respondió Peter— pero creo ninguno de nosotros lo sabemos.
—Me llamo R —dio un paso al frente, apartando la timidez—
—Yo soy Peter, es un placer.
—Mi nombre es Aurora—.
Blanca y Serena contempablan la escena desde lejos, debatiéndose entre ir o no. Al final, corrieron hasta ellos, curiosas por saber quiénes eran. Intercambiaron nombres, preguntas sin respuestas y alguna sonrisa cómplice. Era la primera vez que se veían, pero no sería la última. Aún queda mucho que contar.
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Colorín, colorado, esto aún no ha acabado
Kısa Hikaye¿Y si te digo que Aurora tomaba pastillas para dormir? ¿Y que Blancanieves odiaba las manzanas? ¿Me creerías si te contara lo que realmente le ocurrió a Cenicienta? Olvida todo lo que te contaron: esta es la verdad. Portada realizada por la maravi...
