10 Piedra de molino vacía (I)

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Sin importar que la residencia del gobernador Liu tuviera un patio y un estanque, incluso aunque la llenaran de flores, era sólo una casa cuadrada bien diseñada. Entre más atención se ponía en el Feng Shui, se hacían menos diseños alocados y, aunque había muchas puertas y muros, no podían salirse de las ocho direcciones. Este, oeste, sur, norte, sureste, suroeste, noreste y noroeste.

Y estas ocho direcciones correspondían exactamente con las ocho puertas de dolor, sorpresa, prevención, visión, descanso, muerte, vida y apertura.

Como era común, entre esas ocho puertas, la Puerta de la Apertura, Puerta del Descanso y Puerta de la Vida eran las Tres Grandes Puertas Auspiciosas. La puerta de la Muerte, Puerta de la Conmoción y Puerta del Dolor eran las Tres Puertas de la Maldad. Y la Puerta de la Visión y Puerta de la Prevención estaban en un estado neutral.

Sin embargo, la furia, prosperidad y paz no son estáticas. Como dice el dicho, las puertas auspiciosas no son capaces de aportar fortuna inmediatamente y las puertas malvadas no es posible derrotarlas. Es como la Puerta de la Vida que se utiliza para atraer energía Yang a la residencia o a una persona viva y eso atrae la buena suerte pero cuando se utiliza el Yin para los cementerios o para una persona muerta, el resultado también era atraer la buena suerte. Para los lugares con energía Yin o para una persona muerta, la Puerta de la Muerte es una bendición.

Esto significaba que, para las dos personas bastante vivas, Xue Xian y Xuan Min, siempre y cuando encontraran la Puerta de la Vida, serían capaces de escapar de ese arreglo sanos y salvos.

Si las puertas fueran estáticas, sería fácil de calcularlo pero una vez que cambian por alguna razón, se vuelve un poco problemático.

La situación con la que se habían topado Xue Xian y Xuan Min... El joven originalmente bueno y atento había sido invadido por la muerte por alguna razón y no sólo no les permitió salir del arreglo, sino que liberó a un grupo de monstruos y fantasmas.

Xuan Min abrió la puerta sin dudar y ¡Xue Xian no pudo ni detenerlo!

De hecho, si este asunto hubiera caído en manos de Xue Xian cuando sus piernas estaban intactas y con su temperamento dispuesto a apuñalar al mundo entero, definitivamente hubiera pensado. 'No importa que sean ocho puertas, ¡ni la vida ni la muerte! ¡Al demonio con esa anciana! Las abriré una por una, ¡no creo no ser capaz de encontrar la salida! Y si eso no funciona, ¡llamaré al trueno para destruir todo el lugar!'

Porque estaba seguro que, con sus propias habilidades, nunca habría caído en esos trucos juguetones.

Pero ahora era diferente, Xuan Min era el que tomaba las decisiones en este momento y Xue Xian no era más que un pedazo de papel tomando prestado el hombro de alguien más.

Él y Xuan Min llevaban tratándose menos de una hora y ni siquiera había bebido té juntos. Juzgando por la necesidad de llevarse bien, Xue Xuan aún no podía decidirse que tan fuerte y hábil era ese burro calvo. La arrogancia de monje eminente estaba presente y, a veces, era bastante fanfarrón pero Xue Xian aún no había visto sus habilidades reales.

Algo así como llamar a la lluvia, someter al fantasma solitario de Jiang Shining, pelear contra la anciana que parecía ser un fantasma resentido...

El punto era que no podía derrotar a la anciana resentida tan fácilmente.

Xue Xian realmente dudaba de eso.

Después de todo, ese burro calvo había sido capaz de capturar a un demonio con un pedazo de cobre roto.

Xue Xian preguntó para sí mismo. "¿Alguna vez habías visto a un maestro que usara un pedazo de escombro para capturar a un monstruo?"

-Monedas de Cobre- Libro 1 BúsquedaWhere stories live. Discover now