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Daegu, 18 de enero del 1998.

Querida alma gemela:

No ha dejado de llover como loco. La tormenta cada vez es más grande y no tiene ánimos de detenerse. Ni tampoco yo.

Tan abasta fue que Taehyung tuvo que quedarse a dormir en tu casa y ahora duerme plácidamente aferrado a ti mientras escribo esta carta.

- Me gusta colorear en casa de hyung mientras bebo mi leche achocolatada – dijo esta tarde mientras le echabas otro trozo de leña a la chimenea. El niño tumbado boca abajo en la alfombrilla a tu costado lucía muy contento recibiendo tus mimos.

Con el paso de los días fuiste acercándote tanto al pequeño que ahora no puedes estar mucho tiempo sin saber de él. Tu corazón y el mío quieren saber de él todo el tiempo.

- Encenderé el televisor mientras hierve el agua. Un café con esta lluvia me viene perfecto.

- ¿Cómo hicieron los humanos para aparecer en ese objeto tan pequeño? – dijo Namjoon sentado a mi lado en la alfombra – Es fascinante.

- No lo sé – respondí – Todavía no comprendo cómo funcionan algunas cosas en este mundo.

- Diablos... – resoplaste.

- ¿Por qué está nombrando al innombrable?

- Es un insulto muy común en la tierra – expliqué – pero todavía no termino por acostumbrarme. Me da escalofríos cada vez que lo dice.

- Diablos – repitió Taehyung.

Por poco Namjoon casi se nos desmaya.

- Taehyung esas palabras no las dicen los niños pequeños – le dijiste reprendiéndolo con el dedo – Son palabras horribles.

Te rascaste la cabeza admitiendo para tus adentros la torpeza de dejar salir una palabra como aquella frente a un niño y seguiste mirando la noticia que transmitían en esa pantalla extraña.

- Lo siento hyung – puchereó el pequeño. Luego me miró con ojos tristes y continuó su trabajo coloreando.

- ¿Estás bien? – le pregunte a mi amigo que parecía desorbitado.

- Esa palabra tan horrible saliendo de la boca de mi pequeño niño... no puede ser.

Los ángeles de la guarda tienen mucho respeto por el rey del infierno. Yo no tanto porque estar allí es su trabajo y le he visto varias veces debido a mi trabajo como ángel de la muerte.

No todos se van al cielo.

- Que terrible, pobre gente... – dijiste con rostro apagado – La naturaleza es muy violenta de repente.

- ¿Por qué dice eso?

- Escucha lo que dice la vocecilla de la televisión – dije – Hubo una catástrofe en Chile, un país muy lejos de aquí. Ya decía yo que estaba recibiendo un montón de llamados provenientes de ese lugar...

Imágenes de un montón de agua saliendo hacia la ciudad arrasando con todo y un montón de escombros junto a personas heridas se dejan ver en la pantalla.

- ¿A qué crees que se deba? – preguntó el angelito a mi lado echándole un vistazo al dibujo de su niño amado – ¿Será obra de la naturaleza o de...?

- ¿Papá? No lo creo...

No estoy cien por ciento seguro de mi respuesta. Cuando Papá se enfada envía muchas catástrofes a la tierra.

- ¿Qué pasa hyung?

- Oh, nada – dijiste cambiando de canal a uno animado – Era solo una película muy fea.

QUERIDA ALMA GEMELA | YOONMINWhere stories live. Discover now