café con leche - Castillos en el mar

café nueve

Hoy fue particularmente encantador, cruzaste la puerta y me llamaste, a mí. En ese momento se me detuvo el corazón, no se que me sucede pero cada pequeño detalle me parece encantador, te acordaste mí nombre.

"¡siren!, hey hola amigo"

También debo aclarar que hice el ridículo como siempre. Lo siento, es solo que estoy muy acostumbrado a la formalidad del trabajo.

"hola, ¿como está?"

Me di una cachetada mental después de eso.

"oh siren, ¿por qué tanta formalidad?, tuteame porfavor, cuando me tratas de usted me haces sentir 20 años mayor"

Si sigues diciendo mí nombre voy a morir, no estoy jugando.

"lo lamento mucho, es la costumbre"

"no hay cuidado, en fin, ayer no vine y realmente extrañe tu magnífico café, el que hice en mí casa fue bastante desastroso"

"no creo que haya sido tan malo"

"créeme que si lo fue, no tenía idea que la leche podía quemarse"

En ese momento largué una estruendosa carcajada, para nada comparada con tu suave y hermosa risa, pero aún así te reiste conmigo.

"oh vamos no fue tan gracioso"

"bien, ¿que vas a llevar?"

"tu sabes lo que quiero"

"a la orden señor"

Dije haciendo una especie de saludo militar, puedo acostumbrarme realmente rápido a esto de hacerte reír.
¿No es eso algo peligroso?

Es que contigo todo se siente tan natural, me gusta eso.