El hijo de la luna.

Capitulo 07.

El pequeño peliblanco se despide de su nuevo amigo, viéndolo perderse en el bosque, con su madre, distraído siente una mano tocar su hombro, Ícaro - que haces hasta acá? - dice tranquilo, para no alterar al pequeño peliblanco, Ziri - bueno... L-lo que pasa es que... - el niño no sabe que decir, solo esperaba la reprimenda del mayor, a lo que este reacciono todo lo contrario, Ícaro - estabas aburrido, verdad? - dice inclinándose para quedar a su altura, viendo que el niño no daba respuesta, sabiendo que era obvio, Ícaro - entiendo que te aburra, ven, vamos a jugar - dice cargando al pequeño ojos de sol, este siente una calidez en su maestro, como si tuviera una conexión o algo que lo uniera con él, algo que jamás sintió con Ashura. Con el paso de los días, Ícaro y Ziri se llevaban bien, como si fueran padre e hijo, este lo comenzaba a entrenar poco a poco y los días libres los aprovechaba para jugar con el pequeño, ganándose su confianza, haciendo que el niño vea que Ícaro no le hará daño alguno. Pasan ocho años, Ícaro continúo entrenando a Ziri, viendo el poder que este posee y las habilidades que desarrollo, volviéndose fuerte, aunque con el comportamiento de Ziri cambio, de un niño dulce

a un joven serio

esto se debió a la promesa rota de Misa, ya que lleva cinco años que está dejo de visitarlo, entendiendo el ojos de sol que nunca le importo a la mujer que lo salvo de Ashura, Ícaro la justifica, diciéndole "tiene muchos deberes, pronto vendrá a verte" pero claramente sabía que eso no se cumpliría, dejando de darle importancia, entiende lo agradecido que está por salvarlo, pero se hizo la idea de que lo hizo por caridad, pensando "que mujer que preocuparía realmente por un niño que no es suyo?" "Solo lo hizo para no tener cargo de conciencia" pensamientos así se llenaron su mente, que al final, no quería admitirlo, pero le dolía en lo más profundo de su corazón.

Con el paso de los dias, Ziri planea quitarle la vida al hombre que alguna vez llamo padre, Ashura, en venganza por matar a Natasha, solo por el motivo que el peliblanco no se parece a ellos, siendo un motivo absurdo para el ojos de sol, pero no le importa, quería vengar a su madre. Al caer noche, este prepara su espada, en silencio para evitar llamar la atención de su maestro, sale de la habitación, yendo a la de su maestro, viendo que este se encuentra dormido, siendo la única oportunidad que tendrá, sale de la cabaña, dirigiéndose al pueblo, busca al moreno por todo el lugar, encontrandolo en un bar, hebrio, quejándose y buscando pelea con otras personas del lugar, decide espera a que salga del lugar, permaneciendo afuera durante tres horas, hasta que ve al hombre salir, notando que no tambalea de un lado a otro, a pesar de haber bebido mucho, el joven peliblanco se levanta con sigilo, siguiendo al moreno, llegan a las afueras de la aldea, notando que el ojos de miel se detiene en seco, dudando de su motivo, hasta que lo escucha, Ashura - quien eres y por qué me sigues? - el castaño desenvaina su espada, sin voltear, mostrándose el peliblanco, con seriedad y enojo, Ziri - busco venganza - el ojimiel da media vuelta, ve a un joven con capucha blanca, al quitársela, ve al ojos de sol, dirigiéndole una mirada, llena de desprecio, Ashura - así que eres tú mocoso, veo que sobreviviente estos años - Ziri - y me he vuelto fuerte con el fin de matarte - mantieniendose en defensa, este ríe ante lo dicho por el peliblanco, Ashura - eres ingenuo, Natasha y yo no somos tus padres, ella no lo entendió, se aferró a ti y por su necedad de ser madre, le costó la vida - Ziri - eres un maldito! - el ojos de sol molesto va a atacar directo al moreno, este detiene su ataque con su espada con facilidad, Ashura - esto es todo? Creí que serías un digno rival - este quita su defensa y lo aleja dándole una patada en el estómago, Ziri queda en el suelo unos momentos, viendo que Ashura se acerca a el con la espada para acabar con él

Viniendo a su mente el día que mató. Natasha, reacciona rápido, tomando tu espada, logrando defenderse cuando esté iba a clavarle la espalda en el corazón, Ziri - ya no soy un niño - en un movimiento ágil le quita la espada, teniendo ambas, decide atacar al moreno, pero este se defiende de ambas armas, sin importarle las heridas que le queden, cuidando sus puntos vitales, este continúa haciendo cortadas en su cuerpo, cada vez siendo más profundas sus heridas, provocando que comience a sangrar, al moreno no le importó, hace un sello en su mano, arrojándole fuego, el ojos de sol no esperaba eso, se defiende haciendo un escudo de luz, Ashura - ya veo, entonces ellos tienen razón, tu poder proviene de la luna -.