Tú y tu mundo #Wattys2017

CAPÍTULO 1: UN INFIERNO SOPORTABLE

-Dana cariño despierta ya o llegarás tarde a tu primer día en la Universidad - Dijo mi tía con una voz suave y cariñosa - Y no quieres que eso pase, ¿verdad? – Dijo esta vez con un tono algo amenazador.

-Claro que no tía Beth – Dije con una cálida sonrisa- Pero quiero dormir un poco más – Me tapé con el edredón.

-¡Dana Montes Salvador, levántate ahora mismo! – Gritó enojada.

- Está bien perdón. – Dije aún alborotada por el susto.

Me levanté aún dormida y me dirigí hasta el baño de mi cuarto y empecé con el dilema de cada día <<¿Mmm... Baño o ducha?>>. Si, tengo baño propio, mi tío Brian era rico, él murió y le dejó la herencia a mi tía Elisabeth.

Me decidí por tomar una ducha para despertarme mejor, me relajé 15 minutos y salí del baño para vestirme, cogí una camiseta de tirantes ajustada de color crema con unas palabras en inglés que no entendía, ni me molestaba en hacerlo, combiné la camiseta con unos shorts tejanos y unas Vans de plataforma de color negras. Bajé y me encontré con mis primos Ethan y Clarisa, me puse a desayunar con ellos, comenzamos a hablar de cómo era la ciudad y evitemos el tema de mis padres, mi hermano, y mi tío.

Mi primo Ethan es un chico muy atractivo –no penséis que me gusta, ni mucho menos, es mi primo- también es muy protector conmigo, aunque siempre lo ha sido, mi prima Clarisa –que odia que la llamen así, dice que prefiere Cler- también es muy guapa, siempre ha sido como mi segunda mejor amiga, después de Esther y de Ari, claro, pero por otra parte, siempre se comportado de una manera muy desagradable cuando esta con sus amigas, no me habla, me margina y cuando sus amigas se van, me llamaba o me viene a buscar para pedirme perdón con ojos llorosos.

-Tienes el desayuno en la mesa, ah, y que no se te olvide llevarte el almuerzo y el dinero para la comida. – Me avisó mi tía desde el sofá.

Una vez desayunada, volví arriba, me lavé los dientes y peiné mi pelo rubio y liso con alguna que otra mecha castaña natural, lo dejé suelto y ya estaba lista. Cogí mi móvil y las cosas de la Uni. Bajé para despedirme de mi tía, estaba medio dormida.

-Adiós- le dije susurrando y le di dos besos en la mejilla. Mis primos, que por cierto son gemelos, son más pequeños que yo por 2 años, hacen primero de bachillerato. Yo hago 1º de diseño de interiores.

Cuándo estaba a punto de irme oigo a mi tía:

-Cariño te vuelves a dejar las llaves- Me dijo con una sonrisa.

Asentí en forma de agradecimiento, le di otro beso en la mejilla y le dediqué una tierna mirada en forma de despedida. Cogí mis llaves de casa y las del coche y conduje hasta la Universidad. Encendí la radio para que el camino se hiciera más ameno. Sonaba una de mis canciones favoritas: "Shake It off" de Taylor Swift. Aparqué y la canción terminó.

Todo el mundo me miraba y me sonrojé. Tenía muchas cosas en las manos, y cuándo bajé de mi Mazda CX-5 de color blanco, se me cayó el bolso. Cuándo me agaché a recogerlo mi mano chocó con la de un chico. Era muy guapo, tenía los ojos verdes y el pelo liso, algo alborotado y de color castaño, piel algo morena, labios un poco gruesos y nariz perfecta. Me sonrojé y él me sonrió, me dio el bolso, me dedicó una mirada coqueta y se marchó. ¿Qué acababa de pasar? ¿El primer día de Uni y un chico ya está intentando ligar conmigo? Wow. Nunca me había pasado eso, así que decidí olvidarlo. Y eso es lo que intenté hacer, pero esos ojos verdes brillantes no desaparecían de mi cabeza, trayendo con ellos miles de preguntas: ¿Cómo se llamará? ¿Será de mi curso? Si es así, ¿Irá a mi clase? ¿Le habré caído bien?...

Entré al edificio y me quedé fascinada, aunque no era muy grande, me parecía perfecto, era todo pintado de colores alegres, con un bar pequeño y acogedor, y todo rodeado de naturaleza. Todo aquello me gustaba, pero no lo suficiente como para poder olvidar a aquel chico... Sacudí mi cabeza para sacarlo de ella y me dirigí a conserjería para recoger mi horario y todo eso... Me dijeron que tenía que ir a secretaria, de camino hacia allí sonó el timbre indicando que todos teníamos que ir a clase, así que aceleré mi paso. Llegué y había cola, genial, mientras esperaba entro alguien, ¿a que no saben quién? Exacto el chico de los ojos verdes. Iba buscando a alguien con la mirada, cuando ésta se cruzó con la mía, se detuvo, sonrió acercándose.