C - Parecidos

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Era de noche, la luna estaba llena iluminando cierto lugar considerado como muchos: un agujero. Una chica vestida de blanco caminaba descalza por los fríos pasillos de aquel lugar con paredes enfermizamente blancas. Camino por varios pasillos hasta alejarse de los pasientes del psiquiátrico, llegó hasta la zona del hospital principal, camino hasta uno de los cuartos abriendo la puerta con cuidado.

Dentro de la habitación se encontraba un hombre durmiendo, o al menos eso lo parecía a simple vista, la chica se sentó en la silla frente a la camilla y tomo la mano de aquel hombre.

—¿Que haces despierta? -voltea a verla preocupado- si los doctores descubren que no estás en tu cuarto se volverán locos.

—No tan locos como yo -con una pequeña sonrisa que después se borra- Aiden, no quiero estar en este lugar.

—Lo se, por eso te ayudaré a escapar.

—¿Que? Pero Aiden, no puedes hacer eso -preocupada-.

—No quiero que estés encerrada por siempre -le acaricia el cabello- Fede, tú tienes que ser libre, no estar en un psiquiátrico -saco un par de botes de pastillas de debajo de su almohada y se las da- andando, voy a ayudarte, pero no puedo ir contigo.

Ambos salieron de la habitación, iban con calma pero a la vez prisa para no abrir las heridas de Aiden. Tuvieron suerte de no encontrarse con guardias ni doctores, así que fue fácil que la rubia pudiera escapar, escapar dolida de aquel lugar, dejaría atrás todo.

—Adiós -dice el hombre al aire mientras ve a la chica perderse en la oscuridad de la noche- se que eres fuerte, espero que Peggy no vuelva.

—Adiós -dice el hombre al aire mientras ve a la chica perderse en la oscuridad de la noche- se que eres fuerte, espero que Peggy no vuelva

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Actualmente...

—Gustabo, hoy saldré con el doctor muerte -le aviso Horacio a su amigo a la vez que estacionaba el auto en comisaría-.

—De acuerdo, yo estaré con Volkov de todos modos -saliendo del carro y parendose frente a la ventana del lado del conductor-.

—¿Con Volkov? -pregunta con cierta duda y obvios celos-.

—Horacio, saldrás con Claudio.

—Ya lo sé, aún así no se que pensar. Te veo luego.

Horacio se fue de comisaría con el Audi dejando solo a su amigo, este suspiro pidiendo a Dios algo de paciencia. Camino hasta la entrada de comisaría encontrándose con el ruso.

—Buenas comisario Volkov.

—Buenas señor García ¿Nos vamos?

Ambos subieron al auto del de cabeza pequeña y procurando que nadie se diera cuenta se unieron en un beso para después irse de aquel estacionamiento. Llegando al departamento de Volkov volvieron a besarse con pasión.

—¿Que tal tu día, Viktor?

—Muchos códigos 3, otra vez la Paqui, pero escapó.

—No te preocupes, yo la encontré robando un auto, así que la tuve que llevar a comisaría.

Estuvieron platicando un buen rato, comieron, se dieron mimos y vieron unos capítulos de anime a petición del otaku, se la pasaban bastante bien a pesar de que su relación era secreta, nadie lo sabía, bueno, solo dos personas sabían de aquella relación: Alexander Ivanov y Greco Rodríguez.

Gustabo disfrutaba del tiempo que pasaba junto a su pareja, sin embargo, no estaba seguro de que estuviera con el porque realmente lo amara, tenía muchas dudas.

—Viktor, tenemos que hablar.

El ruso al escuchar aquellas palabras hizo una mueca de tristeza y apagó la tele, esas tres palabras juntas nunca eran buenas.

—¿Que sucede?

—Llevamos saliendo varias semanas, no me mal intérpretes, han sido fabulosas, eres más que solo un corazón frío, lo puedo ver, no trates de engañar a los demás con esa fachada, pero creo que me estoy engañando a mi misma.

Viktor entro en pánico, no solo por las palabras de su pareja, Gustabo se refirió a si mismo como ella, lo cual no era muy común.

—Disculpa, se más claro.

—Creo que solo estoy contigo porque me recuerdas a alguien, son bastante parecidos así que... supongo que entiendes -baja la cabeza triste-.

—Te daré tiempo para que lo pienses bien, talvez solo estás confundido.

—Ten.

Gustabo le dió un pequeño bote de pastillas, estaba dispuesto a decirle su más grande secreto, Viktor observo el bote sin comprender en realidad para que servían.

—Tu eres la única persona en Los Santos que sabe... ya sabes... que soy transexual, has guardado ese secreto, así que te diré mi otro secreto. Tengo TID.

— .... ¿Eres Gustabo ahora mismo? -lo miro a los ojos tomándolo de las mejillas-.

—No, me llamo Frederick.... o... Fede.

—¿Que? Pero.... ¿Cómo? Fede García había muerto.

—En realidad no, sigo con vida, con varias personalidades con las que debemos lidear.

—¿Cuántos... son? -no quería incomodarlo, realmente no sabía cómo tomárselo-.

—Soy yo, Gustabo y.... Pogo.

—Creo conocer a Gustabo, a ti también, eres más tierno que Gustabo -vio el enorme sonrojo en su pareja apoderarse de su cara- pero no conozco a Pogo ¿O si?

—No, espero que nunca lo hagas, esa es la principal razón por la que estoy en esta ciudad, tuve que huir de la anterior porque Pogo... Peggy causo muchos problemas.

—¿Porque me dejas tus pastillas?

—Tengo un mal presentimiento, no se si pase algo malo, o si Pogo sale, eso no quiero que pase, por eso quiero que las guardes, por precaución. Yo aún tengo varias pastillas, así que por ahora no deberíamos preocuparnos.

—Bien, las tendré a la mano.

—Te quiero Viktor -le besa la mejilla- espero aclarar mis pensamientos.

—Voy a esperarte.

—No, no lo hagas -se le escapa una risita- busca a alguien más, no te detengas por mí -lo mira a los ojos- lo que más voy a extrañar es ver tus hermosos ojos en las noches.

Fred salió de aquel departamento dejando solo al ruso, este observo una vez más el bote de pastillas, ese chico era todo un tema, tenía dos personalidades, incluso podía tener más, no lo sabía, ni siquiera sabía quién era la principal, quizás en algún momento el rubio se lo revelaría.

Fred camino por las nocturnas calles de Los Santos pensando en la tontería que había hecho, pensaba que era lo correcto, incluso Gustabo lo pensaba, pero fue una decisión difícil, no quería alejarse de aquel hombre tan blanco como la nieve, pero no podía estar con él si seguía pensando en Aiden.

—La próxima vez hablaras tú, Gustabo, me puse nervioso.

Entre en pánico -hablo una voz en su cabeza, precisamente la de Gustabo-.

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¿Cómo es que Volkov y Gustabo llegaron a tener una relación desde un principio?

¿Quieren más Volkabo o nel?

Volkov no será trans

¿Horacio se enterará de que Gustabo sale o salió con Volkov de forma romántica?

¿Porque Ivanov y Greco son los únicos que sabían de la relación Volkabo?

Secreto [Volkabo]Where stories live. Discover now