Secreto [Volkabo]

F - Fred

—Tengo TID, eso es lo que me provoca estrés, ese estrés lo evado pintando, pero las uñas son tan pequeñas que me mantengo más concentrado en ellas.

Admitió el rubio al mayor mientras jugaban ajedrez, a Conway le sorprendió mucho que García supiera jugarlo y le diera batalla. Jack le pregunto al menor lo que le agobiaba para desestresarse pintando, a lo cual le dijo su secreto.

—Somos tres -siguio explicando disfrazando un poco la verdad- Gustabo y yo, Gustabo no sabía cómo llevar este tema, así que cuando usted abrió la puerta se acojono un poco y me dejó salir.

—Pareces ser más responsable que él.

—Bueno... si no, no sobrevive, casi morimos por muchas de sus estupideces, normalmente son porque no conduce bien el gilipollas -mueve una de las piezas del juego- jaque mate... ¿Me dejo ganar? -entre cerro un poco los ojos interrogandolo-.

— ... Obviamente -miente, no se creía que el rubio le ganará en aquella partida- ¿Tu quien eres?

—Me llamo Fred, el tercero es James, pero hace mucho que no hace acto de presencia, desde hace casi un año.

—¿Quien de ustedes es...? Ya sabes, el original.

—¡Oh! -baja la mirada y toma la pieza de la reina, eso llamo la atención del contrario- hace años que no a vuelto a salir, lo hicimos por su bien... o al menos eso es lo que recuerdo, todos terminamos con los recuerdos bloqueados. Un día simplemente desperté junto con mi hermano en una casa llena de herramientas de tortura, supongo que algo nos hicieron ahí porque estábamos llenos de sangre y muy lastimados, solo escapamos, mi prioridad era él. Yo era mayor, debía protegerlo.

—¿Hermano? ¿Te refieres a Horacio?

—Si... -deja la pieza de nuevo en el tablero- Gustabo se molestará, quizá no debí hablarle de esto.

—La verdad agradezco tu sinceridad, Gustabo no habría tenido los cojones de decírmelo, al menos ahora podré saber con qué mariconetti hablo.

—Conway, le digo esto porque... -se sonroja- yo... lo veo como un padre, Gustabo solo lo ve como un desconocido, como un jefe. Yo veo a un padre -sonrie-. Creo que ya me voy.

Antes de que Conway pudiera decir algo Fred ya había escapado de la situación, se había puesto nervioso al admitir aquello. Camino por las calles de regreso a casa, no era muy tarde, aún había gente en las calles divirtiéndose, todos en sus mundos. Ojalá su mundo fuera fácil, pero todo había sido difícil y lo sigue siendo. Por su mente no deja de rondar lo que pasó hace casi un año...

Había un auto detenido en una parte del bosque donde nadie pudiera encontrarlo, dentro se encontraba un chico rubio durmiendo tranquilamente, sin embargo comenzó a despertar, estaba extrañado, no sabía cómo había llegado ahí. Cogió su celular para ver la hora, era la una, pero su atención fue al año que marcaba su celular "2019", parece que su celular se desconfiguro, era 2015, pero aquel pensamiento se fue borrando al ver todas las cosas programadas en su celular ¿Porque tenía tantas sesiones programadas con médicos?

En un descuido se vio en el retrovisor, varias lágrimas bajaron por sus mejillas al verse ¿Porque era un hombre? Siempre fue una bella mujer. No tenía pechos, sus facciones ya no eran delicadas.

—Graciela ¿Que es esto? -hablo preocupada Fede-.

—¡A Peggy no le gusta esto! -hablo con su exagerada voz aquella personalidad demente, pero también estaba asustada-.

—No tenía la intención de que se dieran cuenta -hablo Jamie- quería acabar con todos los tratamientos antes de darles la sorpresa.

—¿Que coño has hecho? -coge varias hojas de la guantera- ¿¡Querías hacernos la histerectomía!? ¿¡Pagaste para ello!?

Estaba temblando, estaba aterrada, no era normal que un día te durmieras y de pronto despertaras con el sexo contrario.

—¿Porque hiciste esto?

—Ya tuvimos demasiados problemas por cierta payasa que no mencionaré. Estuvimos en un psiquiátrico de mierda dónde solo salimos con ayuda de Aiden. No pienso que arruinen esto, así que nos transforme para que nadie nos reconociera, incluso... finji nuestra muerte... bueno... eso lo hizo Fede.

—No recuerdo haber hecho algo así -admitio Fede asustada-.

—Porque bloquie los recuerdos, Peggy no es la única que puede. Les recuerdo que yo soy la mayor, conozco este cuerpo mejor que todas ustedes. Ahora tienen que aprender a manejar todo esto, solo toma las pastillas y ya, tengo las dosis anotadas en el teléfono, también las otras por si se te a olvidado, no queremos que Peggy vuelva... bueno... Pogo.

—Quizas yo desaparecere por esas malditas pastillas, pero lo harás conmigo maldita hija de perra -obviamente todas estaban molestas, debían adaptarse, quizás no sería difícil para "él" pero pensó en la pobre de Fede-.

—Hagan lo que quieran conmigo, pero esto no lo van a cambiar, no es permanente, si quieren pueden volver a ser como antes, pero tenemos que desaparecer por completo, que nadie nos reconozca. Hago esto por nosotras, por Aiden.... no lo entenderían, porque no lo aman, solo yo lo amo.

—Tambien lo amamos Jamie, no te hagas la importante.

—Mentira...  Grachi, tu eres asexual; Peggy está loca, no le importa tener pareja y seguramente lo despedazaria; y a Fede nadie la quiere. Ustedes no saben de lo que hablo.

Se detuvo al recordar aquello, ese día Jamie/James fue muy duro con todos, después de varios días llegaron a comprender su situación y por eso se adaptaron a esa nueva vida, pero ¿Era verdad lo que le dijo? ¿Nadie lo quería?

—¡Pogo te quiere! Lo sabes ¿No? -salto aquella voz molesta en su cabeza-.

—Mierda... -se queja Fred desganado- las pastillas.

—¿Enserio? ¿Desprecias a Pogo?

—No te despreció, se que me quieres, pero Gustabo se enojara si sigo hablando contigo.

—Son celos, porque Pogo te quiere más a tí porque Fred esta chikito.

—No estoy chiquito -con un pequeño sonrojo- lo siento Pogo, yo también te quiero, pero es por nuestro bien... y del resto. No podemos tener más problemas.

—Pogo y Wilson no se podrán controlar.

—¿Eh? Pogo ¿Quien es Wilson?

—¡Pogo huye!