Durmiendo con la muerte, Libro 1

CAPITULO 12. Hugin y Munin

Este capitulo se lo dedico a PatriciaMorenoBassol por sus valiosas recomendaciones, ademas de decirle que el apodo que me puso me encantó "Sweetdreans" me encanta y me describe a la perfeccion.

Agradezco su apoyo y nuestras charlas las cuales me ayudan mucho a aclarar mis ideas

Tambien a Maneskinn por ser tan mona y talentosa, por querer hacer la portada para este libro, lo cual me trae muy ilusionada

Chicas la quiero un monton y amo sus historias las cuales me traen super enganchada y siempre deseando saber su siguiente capitulo

Espero que les guste este capi el cual muchas ideas seran reconocidas.

oxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxooxoxoxoxoxoxoxoxo

“Hugin  y Munin eran dos cuervos que acompañaron al dios Odin.

Hugin es el “pensamiento” y Munin es la “memoria”. Ambos eran enviados al alba a recoger información y regresaban por la tarde. Se posaban en los hombros del dios y susurraban a sus oídos todas las noticias.

Según cuentan, después de que el dios desapareció, Hugin y Munin al quedar sin su amo y viéndose libres, se adentraron en el inframundo uniendo a los viajeros conectados a él  a través de sus dones…

Rose

Mientras observaba como Zoran se sumergía en un profundo sueño, me dedique a verlo durante unos minutos antes de levantarme de la cama.

Las imágenes de la guerra de los “sin alma” pasaba por mi mente sin tregua, ¿Cómo sabia tanto y porque lo recordaba a pedazos? Debería de existir alguien a quien poderle pedir ayuda, empecé dar vueltas por la habitación viendo tío sin observar nada, sintiéndome como un león enjaulado en esta habitación, me dirigí a la puerta de forma distraída topándome con una complicada cerradura, sonreí al recordar que no tenía un cuerpo que detener y aguantando la respiración  pase a través de la frondosa madera. La sensación fue muy incómoda, era como que si tu cuerpo se encogiera para pasar a través de una delgada línea, volviendo a expandirme a mi forma normal cuando llegué al otro lado. Como la vez anterior  la estructura me quitó el aliento, sus altos techos y grandes ventanales daban una dimensión más amplia a las habitaciones, baje por las gradas topándome en el camino a algunas mucamas, al principio me tense al verlas llegar pero noté que continuaban en sus cotilleos sin saber de mi existencia,

Baje a la cocina y como la vez anterior todo estaba pulcramente acomodado, ni una mota de polvo sobre los muebles o el instrumental, atravesé el patio hasta llegar al jardín, la nieve cubría cada espacio en tierra y un camino de piedra llevaba hasta una fuente de rocas en forma de cascada de tres niveles caía hasta una pequeña laguna, me acerque un poco más para observar que en su interior habían grandes peces de color naranja , en un país cubierto con nieve era muy raro ver una fuente funcionando y mucho menos con peces vivos, metí la mano con gran curiosidad de sentir el agua y justo en ese momento el sonido de graznar de dos cuervos me sobre saltó obligándome a sacar la mano del agua al darme la vuelta en busca de la procedencia del sonido, un nuevo graznar llamó mi atención a una de las ramas  de los tantos arboles congelados.

Me acerque a ellos sintiendo como me llamaban, cuando estuve a tan solo un metro de distancia, los dos cuervos volaron a otro árbol algunos metros mas allá.

-       De verdad tengo que ir? – pregunte a las aves

Los cuervos solo graznaron presionándome a continuar, di un suspiro mientras me encogía de hombros, les seguí algunos metros mas obligándome a bajar por un camino empinado, las nubes empezaban a tapar la luz del sol y el viento corría a mi alrededor apresurándome a continuar.