damm pride (Oliver Wood)

26

Narrador omnisciente:
Oliver estaba ansioso de que le dieran un antídoto a Lydia para poder verla de nuevo.

Había pasado la mayor parte del tiempo en enfermería, saltándose los entrenamientos y dejando muy confundido a todos.

Oliver Wood sin quidditch?

-No puedo creerlo!- maldecía Alicia mientras caminaba hacia donde se encontraba este.

La chica había aprovechado que Lydia se encontraba petrificada para acercarse a él. Le pidió salir a una cita a la que Oliver aceptó sin embargo no fue.

Le había dado plantón.

-Deberá marcharse señor Wood.- le dijo Madame Pomfrey algo cansada.- La poción no tardará en hacer efecto.
-Estará bien?- preguntó aún con la mano en la estatua pero al ver la cara de la enfermera se levantó.- Eh si, disculpa, ya me voy...- dijo algo avergonzado.

Cuando el chico salió del lugar, no tenía pensado moverse a otro sitio, así que empezó a dar vueltas alrededor de la puerta, esperando que la chica saliera y todo estuviera bien.

-Oliver Wood!? Donde estás!?- dijo de repente una voz gritando por los pasillos.

-Que pasa Alicia?- preguntó este pero abrió los ojos al darse cuenta de que le había dado un plantón.- Lo siento mucho...estaba, yo...- empezó a decir pero ella lo interrumpió.

-Oliver, no entiendo, que te ha hecho Anderson? Antes solo era el quidditch y yo recuerdas?- preguntó a lo que el frunció el ceño.

-No, no...Alicia, que haces?- preguntó algo asustado al ver cómo la chica se acercaba a él.
-Solo déjate llevar.- dijo acercándose más hasta el punto de besarlo.

Era forzado y duro, no sentía nada en absoluto pero la chica parecía querer más.

-Esto es simplemente, perfecto.- dijo una voz desde la puerta.

Oliver rápidamente alejó a la chica y miró a Lydia que estaba cruzada de brazos mirándolo.
-Es...estás bien!- dijo intentando hacer carde a ella pero no pudo.

-No te me acerques.- dijo molesta.
-Qué cree que hace señorita Anderson? Debe descansar con los demás...- dijo de repente Madame Pomfrey algo preocupada.

-Ya estoy bien, me puedo ir? No pinto nada aquí.- soltó mirando al chico.
-No deberías....pero si te encuentras bien...- dijo a lo que la chica sonrió como pudo.

-Mejor que nunca.- dijo, entonces se giró para quedar cara a cara con el chico.

Oliver la miraba avergonzado y temía hablar y volver a fastidiarla así que se quedó quieto, esperando a que ella dijera algo.

-Gracias por preocuparte.- admitió a lo que el chico suspiró de alivio.- Ahora, no me hables más entendido?
-No, no es lo que tú piensas, Lydia por favor...- empezó a decir pero la chica lo ignoró.

Ella no estaba para juegos, y Oliver había jugado con sus sentimientos según ella.

Fue cuando pasó la mirada a Alicia que ya la miraba con odio.
-Que pena...siempre de segunda opción, y aún así me prefiere a mi.- le soltó para pasar entre estos y marcharse de ahí.

Oliver solo pensaba en las palabras de la chica, una y otra vez...como si fuera un colapso.
-Por qué me has besado?- preguntó finalmente.

-Qué?- dijo Alicia confundida.
-Que por qué me has besado!? Maldición! Había conseguido ganarme su confianza de nuevo, me había esforzado en todo y solo...lo has arruinado!- le dijo con tono molesto.

Alicia soltó una risa sarcástica.
-Que por qué te he besado? Por qué me gustas Oliver! Pero tú solo tienes ojos para Lydia...no sabes como me gustaría ella! No sabes la envidia que le tengo por que ella es perfecta! Lo tiene todo y yo no tengo nada!- gritó al borde del llanto.- Te odio!

Oliver bajó la cabeza aún procesando toda la información. Lo único que se le ocurría ahora era hablar con Lydia y poder volver a arreglar las cosas.

Entró al gran comedor y bufó al no verla. Se sentó de mala gana y con ganas de llorar.
-Qué has hecho ahora idiota?- preguntó una voz.

-Y por qué supones que he hecho algo Katie?- preguntó este de vuelta haciendo sospechar a los gemelos y a la chica que se encogió daban ahí.

-Por qué siempre haces algo...- respondió Percy quién lo miraba como si no lo conociera.- Y si no me equivoco tiene que ver con Lydia...

-Puede que madame Pomfrey me haya dicho que me esperara fuera y al salir, Alicia viniera y me besara por que le gusto, y justo en ese momento se abriera la puerta y Lydia viera el beso. Contentos?- dijo de tirón a lo que los gemelos se empezaron a reír.

-Bravo Oliver, te luces cada vez más.- dijo Percy intentando aguantar la risa.

-Vas a necesitar ayuda, y para eso estamos nosotros tres.- dijo Katie seria.

Los tres chicos arrastraron al Gryffindor hacia la habitación de los gemelos donde empezaron a sacar artilugios.
-Y...que sabes hacer?- preguntó la chica una vez lo había analizado.- A parte de jugar al quidditch.- recordó rodando los ojos.

-Malabares?- preguntó Fred a lo que Oliver negó con la cabeza.
-Trucos de magia?- preguntó George sacando cartas.

-Me ves con cara de saber hacer trucos de magia?- preguntó algo molesto.

-Sabes cantar?- preguntó Fred riendo a lo que Oliver iba a negar pero se quedó sin decir nada.
-No voy a cantar.- dijo este intentando salir del cuarto.

-Eso nos sirve!- gritó Katie emocionada.
-Pero qué?- empezó a decir al ver a los gemelos y a la chica saltar de alegría.

Y durante toda la noche, Oliver y los tres chicos se pasaron escribiendo y probando maneras de que Lydia perdonara al chico.

Tenían un plan, y tenía que funcionar como fuera.

Lydia no se esperaba nada lo que pasaría a continuación a la mañana siguiente.