XIII

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ARISTÓTELES

Esto es más difícil de lo que dijo mamá, apenas lleva un día el cachorro aquí y ya no lo quiero, solo ha llorado por todo, no sé cómo cambiarlo, no sé cómo alimentarlo y menos sé cómo cargarlo para que no llore. Justo este era uno de esos momentos en que llora demasiado, intente cargarlo pero no funcionó así que lo deje en el nido y me fui a la sala con mis papás y mi abuela, he visto que a los perritos si no les haces caso dejan de ladrar así que eso puede servir con el.

Amapola: Ari el niño está llorando
Aristóteles: Si
Amapola: Ve a verlo
Aristóteles: Es que no lo puedo callar y lo deje en el nido para que ya no moleste
Imelda: ¿Este es el omega que criaron?, Se nota que es tu hijo Polita
Amapola: Ari, ve por el bebé, no debes dejarlo solo recuerda que el doctor dijo que debes tenerlo cerca siempre que puedas
Aristóteles: Ya que

Fui a mi habitación por el bebé, estaba completamente rojo y no dejaba de llorar, lo cargue y le puse una cobija justo como lo carga mamá, volví a la sala para sentarme a lado de mamá lo más lejos posible de mi abuela, ella es alfa, estaba enojada y me daba miedo, de nuevo mamá me ayudó para acomodar al bebé sobre mi pecho para que comiera y acomodo la cobija para cubrirlo

Imelda: Es un completo inútil, ¿Así querían conseguirle un alfa?
Amapola: Tal como usted ha dicho el aprendió a cocinar, lavar ropa, limpiar la casa, es obediente, sabe que frente a un alfa no debe hablar a menos que se lo pidan y todo lo que usted ha hecho de los omegas de su familia
Audifaz: Así es madre, fue educado para ser todo un omega de los Córcega
Imelda: Ni tan bien educado que ya tiene un hijo y no está casado ni marcado, ¿Quien es el padre?
Aristóteles: Yo abue, mamá dijo que es mi hijo así que yo soy su papá
Imelda: Inútil e idiota, todo un Castañeda, ¿Con quién lo emparejaron?
Audifaz: Con nadie, apenas le conseguiríamos pareja, incluso hablamos contigo para buscarle alfa
Amapola: No entendemos como paso esto, Ari no sale del departamento más que a la azotea para lavar la ropa y cuando me acompaña al mercado, todo el tiempo está aquí, no tiene amigos ni conocidos, no había manera de que esto pasara
Imelda: Milagroso no es el cachorro y debió tener un padre que debió ser un beta porque el tamaño que tiene parece que es otro omega y como saben de beta y omega solo salen de igual casta
Amapola: El médico dijo que es tan pequeño por la falta de cuidado que tuvo Ari en el embarazo, aún así ya le sacaron sangre y en tres días nos darán los resultados para conocer su casta
Imelda: Yo no nací ayer, los se reconocer desde que nacen, ese es otro omega, ahora ya que deshonrró a la familia hay que conseguirle un beta, no habrá cortejo y se casarán aquí en el edificio, nadie debe saber que el menor de mis nietos cometió tal atrocidad
Aristóteles: No, yo quiero encontrar a mi destinado, yo no quiero casarme con nadie que no sea mi alfa y yo si quiero un cortejo
Imelda: Por lo visto no es tan obediente, yo no le pedí que hablara y te vas a casar con quién yo decida, no habrá cortejo y no será un alfa, ya me costará mucho que un beta te acepte con un cachorro, un alfa jamás va a querer a un omega estúpido, inútil y con un cachorro de sabrá la diosa quien que yo no me trago el cuento de que no hablas a nadie
Aristóteles: (mirando el suelo) Mamá lo llevaré al nido, ya se durmió...
Amapola: ¿Te acompaño?
Aristóteles: N-no... Yo puedo solo...

Volví a mi habitación, acomode al bebé en el nido y me acosté a lado de el, en realidad no estaba dormido pero ya no quería seguir ahí... Sin poder evitarlo comencé a llorar, yo no miento, no conozco a nadie para que sea el otro padre de mi cachorro, yo no quería deshonrrar a mi familia, yo me portaba bien, era obediente y hacia todo lo que mamá me enseñó... Yo no hice nada malo...

Escuché un ruidito y voltee a ver al bebé quien me miraba fijamente como si pudiera entender algo de lo que pasaba aunque ni siquiera yo podía hacerlo, es estúpido creer que un bebé como el lo haría, estiró su pequeña manita y acerque la mía, al instante tomó uno de mis dedos, era demasiado lindo, limpie mis lágrimas y solo me quedé observando como poco a poco se quedaba dormido otra vez, lo cubrí mejor con su cobija y al poco tiempo también me dormí.

Escuché un ruidito y voltee a ver al bebé quien me miraba fijamente como si pudiera entender algo de lo que pasaba aunque ni siquiera yo podía hacerlo, es estúpido creer que un bebé como el lo haría, estiró su pequeña manita y acerque la mía, al i...

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En Ti Tengo Todo. (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora