아홉

1.4K 254 249
                                    

YeonJun se encontraba en una auténtica crisis de identidad. Ya no estaba seguro de qué le gustaba. Por un lado amaba a RyuJin, pero por otro se sentía atraído por el castaño. Se sorprendió a si mismo estando celoso al pensar en que los dos menores eran pareja y eso solo era una parte de su confusión.

Ya no sabía si quería a la rubia o si quería al castañito como su pareja. Soltó un suspiro y se quedó pensando en ello.

¿Era heterosexual? ¿Era gay? ¿Era bisexual? ¿Realmente amaba a RyuJin? ¿Qué sentía por Kai? ¿Qué era lo correcto?

Todas esas preguntas comenzaron a agobiarlo. Estaba casi seguro de que en aquel momento, si le dieran a elegir, elegiría al menor sin pensárselo. Pero la rubia era muy hermosa además de ser honesta y buena con él.

Estuvo alrededor de tres horas meditándolo hasta que encontró la respuesta. Se había enamorado lentamente de Huening Kai. A Ryu la veía como una amiga, pero a Kai como algo más que eso. Él le agradaba y le caía bien, cuando se empezó a juntar más seguido con él, se fue enamorando poco a poco. Sin darse cuenta.

Quería hablar con el menor pero no tenía el valor. ¿Y si realmente estaba saliendo con el otro chico? Tomó valor de quien sabe donde y primero llamó a RyuJin.

¿Bueno?—Se oyó desde el otro lado de la línea.

—Hola, Ryu. Te quería preguntar ¿Nos podemos juntar en unos quince minutos?—Preguntó jugando con el bordillo de su camiseta.

Claro, Yeonnie. ¿En el parque al lado de la preparatoria?

—Sí, allí está bien.—Confirmó el pelirrosa.—Nos vemos.—Finalizó y cortó la llamada.

Guardó su teléfono en su bolsillo y salió de su hogar para ir a la dirección. A pie tardaría unos 10 minutos por lo que tenía suficiente tiempo para pensar como le explicaría a la rubia que terminaría con ella porque se enamoró de un chico.

Llegó al parque y se sentó en una banca a esperar a que llegara su, no por mucho tiempo, novia. La vio y cuando esta pareció verle se acercó.

—Hola, Jjunie.—Saludó con una sonrisa mientras se sentaba a su lado.

—Hola, Ryu.—Sonrió un poco.

—¿Por qué me citaste aquí?—Preguntó curiosa.

—Pues... Seré directo ¿Ok?—Consultó, recibiendo un asentimiento por parte de ella.—Yo ya no puedo ser tu novio, quiero que terminemos.

—¿Qué? ¿Por qué?—La chica no podía estar más confundida y triste. ¿Qué había hecho mal?

—Yo... Yo me enamoré de un chico.—Choi desvió la mirada, ocultando en gran parte vergüenza y también algo de miedo a ser juzgado.—No te pediré nada pues no estoy en posición de hacerlo, pero me gustaría conservar tu amistad. ¿Podrías considerarlo?

RyuJin se quedó unos instantes tratando de asimilar todo. A los segundos, soltó un suspiro.

—Está bien. Terminamos. Ve y conquista al chico, sé feliz. Y podemos seguir siendo amigos, cuenta conmigo.—Sonrió tratando de ocultar el nudo en su garganta y la opresión en el pecho.

YeonJun la miró con evidente sorpresa, no esperaba aquella reacción. Sonrió en grande.

—Gracias, RyuJin. Eres la mejor chica que he conocido. Sé que conocerás a alguien que te valore y te trate como debes.

—Por eso no te preocupes, me conozco a mi. No le debo nada a nadie.—Sonrió. Si hay algo que YeonJun amaba de RyuJin era eso. No se deja aplastar por nada.—Ahora ve, encuentra al chico, conquístalo y gana.

YeonJun asintió.

—Eso haré. Gracias Ryu.—Se despidió y fue en busca de Huening Kai.

Lo primero que hizo fue llamarlo, luego de unos segundos, le contestó.

¿Aló?—Oyó a través del teléfono.

—Hyuka ¿Nos podemos juntar? Tengo algo importante que decirte.

Eh, claro hyung. ¿Cuándo?

—En el centro comercial en 10 minutos. ¿Puedes?

Sí, sí puedo, hyung. Nos vemos en 10 minutos.—El menor colgó y el mayor guardo su teléfono.

Fue camino al centro comercial. Y al llegar compró un peluche enorme de osito que sostenía un corazón. Vio al menor a la distancia, luciendo perdido.

Se acercó a él y le dio un susto, haciendo que el castaño soltara uno de sus característicos gritos, atrapando muchas miradas.

—¡Hyung! Es malo. Me asustó muy feo.—Declaró el menor con un puchero.

—Perdón, Kai.—Rió el mayor.—Pero te tengo algo como compensación.—Sonrió y le mostró el peluche.

—Hyung, es muy lindo de su parte.—Sonrió y tomó el peluche.—Es muy lindo~.

—Pero no tanto como tú.—Murmuró el pelirrosa.

Kai se sonrojó levemente al oírlo.

—¿Eh? Hyung, no diga tonterías.

—No las digo.—Yeon lo miró a los ojos.—Kai, estás semanas que nos hemos estado conociendo y hablando me he estado comenzando a sentir atraído por ti. Y creo que ya me enamoré. Por lo que te quiero hacer una pregunta.

—Hyung...

—Huening Kai, ¿Te gustaría ser mi novio?

El menor no sabía que responder.

Por otro lado, un alto pelinegro escondido detrás de un poste cercano, escuchaba todo, con el corazón casi roto y a nada de salir corriendo.

—Yo... Hyung, déjeme pensarlo.

—Está bien, tómate tu tiempo. Yo esperaré.—Sonrió.

El más alto ya no quiso oír y salió corriendo de allí, mientras los otros dos ni siquiera notaron su presencia.

Huening Kai sonrió también.

—Gracias, prometo darle la respuesta lo más pronto posible.—Dijo abrazando el peluche que recibió.

—No agradezcas, tu solo asegúrate de que es lo que quieres.

Luego de eso intercambiaron un par de palabras y cada quien fue a su hogar, sin saber que un pelinegro sufría por su posible relación.

Cartas De Amor ¿Por Wattpad?Where stories live. Discover now