VAYA PAR DE EMBARAZADOS (STEREK & NOAHTER)

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De un puntapié, Derek abrió la puerta de la casa del sheriff portando a un Stiles frenético y enloquecido en brazos que le tiraba de los pelos a la vez que gritaba:

-ESTO DUELE QUE TE CAGASSSS, IIIIAAAAGGG, POR DIOS, POR DIOSSSS-

El moreno, sintiendo los dedos del castaño tirar con fuerza de su pelo, rugió:

-¡¡Stilesssss!!-

-¡¡QUÉ!!-

-¡¡Me vas a dejar calvo!! -

Stiles, aferrando con aún más fuerza el cabello del pelinegro, logró tirar con tal intensidad que hizo a Derek echar la cabeza hacia atrás.

-Olvida volver a metermela mientras me acuerde...¡¡O TE HARÉ LA VASECTOMÍA MIENTRAS DUERMES Y SIN ANESTESIAAA!!-

Resignandose, Derek intentó llegar hasta el todo-terreno para, dejándolo en el asiento posterior y verse, al fin, libre de su mano, darse prisa en subir él y poner rumbo a la clínica.

Justo al desaparecer ellos, los siguientes que abandonaron la casa fueron el sheriff llevando a un Peter convertido en lobo en brazos y hacia el patrulla.

-Esto es increíble, increíble, no me lo puedo creer- se decía, una y otra vez.

El lobo solo gemía y sollozaba a causa del dolor.

Como pudo, Noah abrió la puerta de atrás del coche y depositó al lo bueno en el asiento trasero para, como las balas, entrar él al asiento del conductor.

Volviéndose a Peter, dijo:

-Aguanta un poco más ¿Eh?-

-Mmmm- guañó el animal y se enroscó para soportar el dolor.

Los primeros en llegar a la veterinaria fueron Derek y Stiles.

El moreno salió de un salto del vehículo y dirigiéndose a la puerta de atrás la abrió y volvió a coger en brazos al castaño, quien otra vez agarró del pelo a Derek con la mano.

-Juro que no me vas a poner  ni una miserable garra encima- avisó Stiles con voz lúgubre.

Con la cara desencajada, Derek optó por no responder.

Lo único que quería era que tuviera de una buena vez al cachorro y todo volvería a la normalidad, entre comillas, por supuesto pues en cuanto naciera el bebé...

¡A tomar por saco la intimidad y los polvos por sorpresa o del tipo "Aquí te pillo, aquí te mato"!

Pero, por otro lado...

Ya no serían ellos dos solos.

Y tendrían a alguien con ellos.

Tendrían a su cachorro.

Entrando en la clínica no vieron a nadie.

Preso de histeria, Derek rugió:

-¡¡DONDE ESTÁS ALAN??-

La puerta de la consulta se abrió dejando ver a un veterinario atónito al verles aparecer.

-¿Que le ocurre?-

El azabache caminó hacia él.

-Stiles...se ha puesto de...parto- contestó Derek sintiendo cómo los dedos del castaño se enredaban y tiraban de su pelo.

-¿Como va a ser eso?- se asombró Deaton pero despejó la mesa donde llevaba a cabo todas las operaciones y revisiones.

Derek colocó al joven encima de ésta e intentó alejarse...