↺𝙳𝚘𝚗'𝚝 𝚑𝚊𝚗𝚐 𝚞𝚙 ｢sasodei｣

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Cuando la noche llegaba y los recuerdos le consumían, Sasori había adoptado la extraña manía de ver series de terror o documentales de asesinos seriales debido a que así al menos no recordaba a Deidara. Era extraño pensar que prefería tener pesadillas que las memorias de su ex, pero se había hecho el hábito y ahora le costaba desprenderse de él.

Mientras miraba una muy mala película de miedo, poco a poco sus ojos se cerraban, a lo que antes de quedarse dormido, se quitó los audífonos y dejó cargando su celular. Apenas eran las ocho de la noche, y aunque acostumbraba dormir temprano para llegar bien descansado a la escuela, le fue inevitable no pensar en lo patético que era dormir a esa hora, sin embargo estaba muy cansado. Su salud mental había disminuido constantemente las últimas semanas.

Lidiar con su ruptura, los trabajos y los exámenes le estaban volviendo loco.

Se quedó dormido pero su mente estaba imaginando otras cosas. Estaba por alguna razón en el salón de Akatsuki, con todos los miembros, incluyendo a Itachi, quién se había unido hacia un rato ahora que era compañero del consejo estudiantil con Yahiko.

Todos los miembros le miraban acusadores mientras él se acercaba a su asiento habitual con poca seguridad.

Una vez había tomado su lugar, los ojos de todos seguían fijos en él, acusadores y las ventanas se abrían y cerraban erraticamente con el soplar del viento, que hacía todo sonar más escalofriante.

-Nos dejaste solos, por tu culpa cerraron el club- dijo Nagato con voz vacía, y sus extraños ojos púrpuras le perforaron hasta el alma.

-Yo no hice nada...

Su voz no salió como esperaba, era temerosa y baja. Tenía miedo y lo peor, se notaba.

-Te alejaste de nosotros sin razón, eres un mal amigo- está vez, quién le acusaba era Tobi, que le echó en cara aquel reclamo sin una pizca de tacto- nunca te importamos.

-N-no, no es eso...

-Me hiciste daño y luego me abandonaste- dijo Deidara- jamás te lo perdonaré.

-Esperen...yo...

-¡Sasori-san!

Volteó la vista a un lado, Kisame en ese instante abría su boca y se acercaba a él con sus afilados dientes con la aparente intensión de devorarlo, haciéndole despertar al instante.

-¡Ahhh!

Se levantó sudando y gritando. Miró su reloj a un lado. Las tres de la mañana.

Desgraciadamente, había llamado la atención de su abuela quien entró a su habitación rápidamente con bate de béisbol.

-¡¿Dónde está?!

La mujer comenzó a buscar en la habitación de su nieto algún intruso, y al no encontrarlo, fijó la vista en él.

-Si no hay ningún ladrón ¿Por qué gritaste?

-Abuela, baja eso, te vas a lastimar.

-No soy débil Sasori-kun.

-Pero si eres vieja.

Se levantó y le quitó el arma a la mujer, para después guiarla con cuidado a su propia habitación. La abuela Chiyo era una mujer mayor y necesitaba que la cuidaran, no que la asustaran con gritos a mitad de la madrugada.

Una vez todo en orden, suspiró mientras miraba la foto enmarcada en su mesa de noche, justo a un lado de una de él con sus padres y Chiyo.

Eran todos los miembros de Akatsuki juntos. Deidara estaba a su lado, como siempre queriendo llamar la atención junto a Hidan. Se avergonzó de tener esa especie de sueños raros sobre sus amigos, era incómodo y sobre todo le dejó pensando seriamente sobre su decisión sobre haber abandonado el grupo.

Quizá si estudiaba una hora menos al día no haría tanto daño...

-Demonios, no volveré a ver documentales de nuevo- maldijo en voz baja mientras volvía a taparse con la cobija.

Al día siguiente después de clases fue hacia el salón del club, avergonzado con sus libros. No necesitaba entrar de nuevo ¿Cierto? Bastaba con hablar sinceramente con Yahiko sobre sus problemas, el de cabello anaranjado era comprensivo, pareció haberlo entendido la última vez que se habían visto.

Aún así, apenas pisó el salón se arrepintió. Estaban todos ahí, justo como en su sueño, viéndolo al notar su presencia, casi como juzgandolo. Incluso estaban en las mismas bancas, estaba también Itachi y Deidara...era escalofriante.

-¡Sasori-senpai!- el líder se acercó a él contento, podía respirar ahora que sabía que nadie se lo iba a comer- que bueno que volviste, necesitamos a todos los miembros.

-En realidad yo...

-¡Leíste mi mensaje ¿verdad? Por eso veniste- gritó Tobi lanzandose a abrazarlo, cosa que le hizo repelerle.

-No lo leí, yo...

-¡Me alegro tanto de que hayas vuelto senpai!- Nagato también se acercó a saludar.

No pudo hacer más, si se iba en ese momento quedaría mal frente a todos. Simplemente asintió y se fue a sentar junto a Kisame y Kakuzu. Cuando este primero se incorporó para mirarlo, Sasori no pudo evitar pegar un saltito.

-¿Está todo bien?- le preguntó- ¿Te asusté?

-En tus sueños.

"O en los míos" pensó.

Hola 😳😳

Que pena haberles fallado, les juro que creí haber puesto que actualizaría cada lunes y viernes, pero al final quedé 🤡 y no fué hasta que me puse a leer los comentarios que noté que decía m i e r c o l e s.

Una disculpa 😔👌 es por eso que habrá otra actualización en un rato, como disculpa por no haber puesto atención.

Muchas gracias por leer, ya somos 10K de ojitos 💗💗 se los agradezco mucho, de veras 👊

⇱𝚁𝙰𝙲𝙷𝙴𝙻𝚁𝙴𝙳⇲