Ανακάλυψη

❄ Χριστούγεννα ❄

Era la noche de Yule, estaban en la mansión Malfoy, había decidido pasar las navidades con ellos, ¿Cómo logró engañar a Ron y Hermione? No tenia ni la más mínima idea.

Era la primera Navidad donde la pasaba tranquilo, ya terminó la guerra y no tiene a un lunático siguiéndole los pasos para matarlo. Era demasiado confortante.

Cuando Mcgonagall dijo que los alumnos de séptimo año podían regresar a tomar su año de nuevo, no dudó ni un segundo en regresar y tener un año normal.

Estaba con Draco caminando por el nevado bosque de la mansión, había acabado el ritual del Yule y ahora mismo estaban teniendo un pequeño debate o más bien, Draco explicándole la importancia del Yule para ellos.

—Entonces la Yule a sido de gran importancia en todas las generaciones de magos, cómo para que un viejo venga y quiera imponernos la "navidad" solo para hacer sentir cómodos a los magos de familia muggle— Draco se quejaba, moviendo las manos exageradamente.

—Yo vengo de una familia muggle— Añadió Harry indignado y Draco rodó los ojos.

—Si, pero eres mestizo, tu papá era sangre pura, lo que significa que celebraba la Yule— El moreno soltó un bufido —Y por eso te explico todo esto, para que no seas un ignorante y sepas las costumbres que se deberían de hacer—

—Pero sigo sin entender cual es la diferencia, además, no es como si haya pasado el tiempo suficiente con mi padre como para que me dijera que es la Yule— Frunció el ceño confundido —Es más, ni siquiera pasé tiempo con mi padre— El rubio puso los ojos en blanco y procedió a volver a explicar.

—La Yule es para pedir deseos, es un ritual a la luz de la luna, como lo que acabamos de hacer hace un momento, además das 12 regalos ante de fin de año a las personas que son importantes para ti— Termino de explicar y Harry asintió comprendiendo.

—¿Por eso me haz dado regalos?— El rubio rodó los ojos exasperado e hizo un sonido de afirmación. —Bueno, la próxima Yule, te daré  los 12 regalos—

—Me ofendería si no lo hicieras— Ambos rieron y terminaron la conversación, siguiendo caminando en un silencio cómodo, mientras iban tomados de la mano.

—Adentro no te di tu regalo— Habló nerviosamente Harry —Por que, supongo- bueno yo quería dártelo ahora, pero...— El rubio levantó una ceja, escuchando a su novio balbucear.

—Harry, estás balbuceando, no entiendo nada—

—Perdón— soltó una risa nerviosa —Es que no se qué dirás—

—¿Qué diré...?— No término de hablar cuando el moreno se colocó en rodillas y sacó una cajita, Draco llevó sus manos a su boca, observando el hermoso anillo de plata con una esmeralda en el centro, tan sencilla pero hermosa a la vez —Por Salazar, Harry, dime qué es lo que creó que es, por qué si no te voy a dar un maleficio—

—Dime que esperás una propuesta de matrimonio, por qué ya tuve suficientes maleficios a lo largo de mi vida— Ambos rieron —Draco Lucius Malfoy ¿Te quieres casar conmigo y hacerme feliz pasando el resto de nuestra vida juntos?— Y el rubio se lanzó a abrazar al moreno, tirando a ambos en el proceso.

—Si— susurró en su oído.

—¿Si qué?— El Slytherin soltó un bufido.

—Si me quiero casar contigo— Y llegaron a la mansión contándole a los padres del rubio, Narcissa soltó un chillido nada digno de ella y Lucius se atraganto con su vino.

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Ya habían regresado a clases, todo Hogwarts estaba llenó de nieve, se veía hermoso después de tanto tiempo.