Ανακάλυψη

Ανησυχία

Estaban en la habitación del Slytherin, acostados en la cama del rubio mientras miraba el techo, ambos perdidos en sus pensamientos. Draco tomó la mano de Harry y cuando quiso acariciarla sintió rigurosa su piel, mientras que el moreno siseo del dolor.

—¡Por Merlín Harry!— gritó mientras tomaba la mano del Gryffindor —¡¿Quién te hizo esto?!—

Harry empezó a temblar, no sabía si de los nervios o del recordar a la nueva profesora, sin embargó le contó lo sucedido —Es el castigó de Umbridge por decir que Voldemort había vuelto, me dio una pluma y me dijo que escribiera "no decir mentiras" y cuando escribí en el papel, se empezó a marcar en mi mano—

—¡Maldita sea Harry! Lo hizo con una jodida pluma de sangre, esas malditas cosas están prohibidas— Draco sentía su sangre hervir, pero al ver a su novio temblando lo atrajo en un abrazo el cual fue correspondido.

—Está bien dragón—

—¡No! ¡No está bien, Harry!— exclamo furioso —esa maldita perra no te puede hacer eso.— Le volvió a tomar la mano y rozó la cortada con sus dedos, Harry hizo un volvió a sisear por el ardor que sintió.

—Aún duele— Se quejó, tratando de alejar su mano.

—Ven, te voy a poner un ungüento— Se paró y camino directo al baño, para regresar con un bote pequeño y empezó a untar el contenido en la herida. —Mi padre se enterará de esto—

—No creo que decirle a Lucius sea lo mejor— Draco soltó un suspiro, no de acuerdo con la decisión, pero no replicó de más.

—No quiero más problemas ¿Entendido?— Dijo después de untar la mano herida. —No quiero que te vuelva a lastimar— dio un beso en la frente de Harry.

—Está bien amor—

Después de eso Draco estuvo alerta de Umbridge, tratando que sus serpientes y cualquier otro alumno no se metiera en problemas. También estando al pendiente de su novio, no queriendo que lo castiguen más (todavía estando en desacuerdo en la idea de no contarle a su padre)

En una ocasión Harry le contó la idea de sus amigos sobre hacer un grupo a escondidas de defensas contra las artes oscuras. Al principio dijo que le parecía bien mientras todos se cuidarán, hasta que dijo que querían que él fuera el que enseñará.

—Harry no digo que esté mal, pero si los descubren tu te vas a llevar lo peor del castigó— Suspiró sobandose las sienes, cansado y preocupado de esta situación.

—Si nos descubren no me importaría llevar la mayor parte del castigó, mientras puedan aprender a defenderse— Draco abrió la boca, dejando soltar un suspiró incrédulo, vió a su novio esperando a que dijera una buena excusa, pero su expresión seguía en total seguridad y seriedad.

—¡Por Merlín Harry! ¡¿Como puedes decir eso?!—

—Vamos Draco, he sufrido peores— La expresión furiosa del rubio se marcó más, cuando se dió cuenta de su mala decisión de palabras su novio ya lo estaba atacando.

—¡Oh claro! Eres el niño que vivió, obvio no es gran cosa lo que está sucediendo— Lo miraba fríamente y su voz derrochaba un veneno que no había escuchado en un largo tiempo —esto no estaría pasando, si me dejaras decirle a mi padre—

—No puedes resolver todo con tu padre, Malfoy— siseó enojado —Ella dijo que tiene el permiso del ministerio—

—Lo sé, pero yo si puedo resolver esto, y todavía más si tiene el permiso del ministerio, ¿Qué diría la sociedad si el ministerio aprueba esos tipos de castigó en los estudiantes? —Se acercaba lentamente a él, como un cazador acechando a su presa— Pero oh no, el niño que sobrevivió quiere resolver todo solo—