-Casi no vuelven- dijo la mujer. Tenía el pelo corto y café, su piel parecía de porcelana tan blanca y limpia como si no tuviera ni una solo imperfección, sus ojos eran verdes claros brillantes y destellaban algunos tonos de amarillo, era delgada y casi de la estatura del otro hombre, quizás un poco más baja.El hombre tenía rasgos asiáticos, era cacheton, sus ojos eran oscuros al igual que su cabello y algunos mechones caían sobre su frente, su nariz era fina y delgada, era algo alto pero comparado con Daryl se veía más bajo de lo que en verdad era.
- ¿hola?..-Me dijo algo confundida la mujer, me miró de arriba abajo y sonrió.- Yo soy Maggie.
- Ella es Zara- dijo Michonne y puso una mano en mi hombro.-la encontró Carl.- si porque soy un perro perdido, claro.
- Yo soy Glenn.- dijo el hombre, iba a decir mi nombre pero como Michonne ya lo había echó, me pareció estúpido decirlo de nuevo.
-Hola-dije, y ambos sonrieron, y no soy mucho de esas cosas pero me dieron una buena vibra.
-Bien vamos, Rick te tiene que hacer las preguntas.-dijo Daryl, se pasó la mano por debajo de la nariz, limpiándose y empezó a caminar adentro.
Todos empezaron a caminar, y este es el momento en que me arrepiento, odio lo interrogatorios y esto me suena a uno. Voltee a mi lado y el único que seguía allí era Carl, lo miré y me miró, no estaba muy segura de entrar, él solo asintió como diciéndome que estaba bien, empezó a caminar y yo lo seguí.
(....)
Estaba sentada en una silla en un tipo de cafetería, había otra silla enfrente de la mía y los que ya conocían estaban parados atrás de esa silla, algunos charlaban como Maggie que le preguntaba a Michonne como les fue, o otros como Carl que me miraba fijamente.
Escuche una puerta abrirse y entraron dos personas, una señora con un corte de pelo al filo de la cabeza y blanco con tonos grises, sus ojos eran hermosos muy azules, parecidos a los de Carl, pero los de ella eran más claros. Él hombre era mayor tenía un overol, le faltaba una pierna y traía una muleta, todos su cabello y barba eran blancos, parecía la encarnación del típico Santa clause.
Vi que lo primero que hizo la desconocida fue acercarse al grupo saludar y abrazar a Daryl, el señor le sonrió a Maggie y después me miró.- Soy Hershel...-dijo el señor.- y tú cómo te llamas pequeña.-dijo, y ese "pequeña" me hacía querer pegarle un puño, "pequeña" me hacía sentir inferior, pero sabía que solo lo hacía porque era dulce, así que decidí sonreír.
- Soy Zara.
- Bueno, bienvenida Zara.-dijo Hershel.
- Niña- dijo la mujer, llamando mi atención- me llamo Carol.- yo asentí, parecía dulce, pero conozco bien a las de su clase, la que parece una simple querida señora, cuando en realidad es todo lo contrario, el lobo disfrazado de oveja.
-Y yo Rick.- dijo una voz autoritaria, hizo que todos lo volteáramos a mirar, y apareció un hombre quizás de unos 40 llegando a los 50, tenía barba y estaba sudado, su ropa estaba un poco sucia.- Y esta es nuestra prisión.- dijo y se sentó en la silla en frente de mí, y todos se quedaron callados y me voltearon a mirar, mientras se hacían detrás de la silla.
-Tenemos un sistema, que nos ayuda sobrevivir el sistema es frágil y tenemos que protegerlo, aceptamos personas, si tu respetas nuestras reglas y el sistema entonces tu y yo llevaremos bien, tienes que trabajar, hacer tu parte, cada quién gana su lugar, entiendes?-dijo amenazante y alzando una ceja, yo solo asentí de mala gana.
-Bien.- vaya este sujeto si que se toma en serio su rol como líder.-ahora si pasas las preguntas te queda si no, te vas.-dijo él.-Bien te voy a hacer tres simples preguntas y tu las vas a responder honestamente.- Me dijo, yo fije mi mirada en él mientras asentía.-¿ A cuantos caminantes has matado?-preguntó, y apenas preguntó yo fruncí el ceño, se supone que debía contarlos?
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Revivir|The walking dead| Carl Grimes
Fanfiction........y así fue como termine con un grupo de lunáticos, en una prisión en medio del fin del mundo, y de cómo termine enamorada de un niño vaquero mata zombies. En donde conocí personas que se volvieron mi familia cuando perdí la mía, personas que...