❝ Todos aprendemos a mentir en la vida, algunos hacemos más uso de ellas que otro, pero eso no quiere decir que en una de esas mentiras, no vaya la verdad. ❞
→ Basada en la novela china con el mismo título que la historia: MR. SWIMMER
El silencio podía llegar a ser lo necesario o lo más incomodo que podía haber, es este caso estaba siendo lo segundo.
Tan pronto como llegaron a Jeju, el rubio no perdió la oportunidad de hablar con la menor, tenían que arreglar asuntos pendientes y no dejaría que se fuera hasta al menos haber terminado de conversar.
—— ¿Crees que podríamos volver a intentarlo?
No se iría con rodeos, quería ser directo de esa forma podría saber si tenía esperanza o un corazón roto por completo.
—— Jimin.
—— Sé que ahora estás con Hoseok, pero no es justo para ti, para mí. —— tomo su rostro con delicadeza. —— Sabes que nunca fue mi intención lastimarte pero tenía que hacerlo si no quería que te lastimaran.
—— Es cosa del pasado. Ahora se la verdad de todo y me alegra saber que tú también me extrañas te pero-
—— Mimi por favor.
Intentaría todo antes de tener que decidir por su futura vida.
—— No creas que no quiero estar contigo, pero ahora soy una mujer comprometida. —— dejo que una pequeña lágrima bajara, mojando así una pequeña parte de la mano del chico.
—— Él no te hará feliz, lo querrás pero jamás lo amarás.
—— Tú no sabes eso, el tiempo puede cambiarlo todo.
Pensaba que sería más sencillo, dado que todo estaba resuelto con respecto a su padre pero ya veía que no. De ser así el asunto tendría que hablar con Hoseok, él entendería.
Su historia se merecía una segunda parte, no un final. Intentaría recuperar un poco de la felicidad que le había sido arrebatada.
—— No dejaré que esto acabe aquí. —— tomo su mentón y dejo un casto beso. —— Entiende que no te perderé, no otra vez.
Cuando se desea algo se tiene que luchar con el corazón. Lo sabía, lo tenía presente y ya que la oportunidad había aparecido no la desperdiciaria.
—— Jimin ¿Qué es lo que has hecho?
—— Dejarte en claro que me importa un carajo que seas una mujer comprometida y que el hombre con el que te vas a casar es mi amigo. Porque yo quiero que estés conmigo y tú quieres que yo esté contigo.
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Dejo un beso más solo que esta vez en la mejilla de la menor.
—— Nos vemos luego Mimi, tengo cosas que resolver.
Se marchó, dejando a la castaña sonrojada y hecha un manojo de nervios.
Lo que no sabían es que alguien los había estado viendo y escuchando desde que llegaron a las albercas del hotel.
