¡Admito que te amo!

Capítulo 7 "La guerra entre el bien y el mal"

Bárbara guardo silencio un largo rato, ninguno de los dos fue capaz de decir una sola palabra mientras comían, en el fondo ambos sabían que nada podían hacer ante esa situación, pero se negaban a dar por terminado todo.

-Bárbara, ¿Estas dispuesta a vivir con la sombra de nuestro pasado?- dijo finalmente Franco, casi aturdido por el momento.

-No lo sé, créeme que, por más que lo intento, soy incapaz de dejarte ir, de dejar ir esto que nos tiene prisioneros el uno del otro- respondió arrastrando en su voz esa pesadez que la invadía

-No sé si pueda dejarte, porque...- hizo una breve pausa, meditando un poco sus palabras, tratando de buscar alguna expresión en ella, pero como era costumbre, su rostro era plano, sin mostrar emoción alguna.- Te amo Bárbara, te amo como no imagine amar antes, quizá me aterra saber que puedo perderte o quizá me aterra más saber que mi amor puede transformarme en algo que nunca imagine.

Bárbara sintió como su cuerpo se estremecía ante las palabras de Franco, sentía una revolución de sentimientos dentro, a pesar de que sus labios no eran capaces de decir algo, su mirada lo dijo todo, Franco vio como un par de lágrimas salían de sus ojos y supo que esta vez, no eran de tristeza, justo en ese momento, supo que la entendía a la perfección, cuando no trataba de predecir sus acciones o emociones. Se levantó se su asiento y se puso de cuclillas a un lado de ella, puso una mano sobre la pierna de Bárbara, mientras se veían fijamente.

-He luchado por borrar este sentimiento, pero, cada vez que te veo, soy incapaz de no amarte, de no enamorarme de esa arrogancia que te hace única.- añadió

-No sé que decirte, porque yo tampoco he logrado controlar mis sentimientos desde que apareciste en mi vida, fue como si derrumbaras todo lo que había sido siempre, me has enseñado a sentir emociones que desconocía hasta hace poco – respondió finalmente Bárbara.

Franco le dio un beso fugaz en los labios, ella se limitó a dejarse llevar por la oleada de emociones que la invadían.

En pocos minutos, ambos abandonaron el restaurant, Franco la acompaño hasta su auto, admirando aquella belleza que lo tenía cautivo.

-¿Nos vemos en la noche?- pregunto ella sin el menor pudor

-Si, pero en tu casa, lo había olvidado por completo, esta noche Aníbal me invito a cenar con ustedes.

-Perfecto, por primera vez agradezco la imprudencia de mi hijastro – añadió con una sonrisa

-¿Puedo saber el motivo?- interrogo Franco mientras la tomaba por la cintura y la atraía hacia su cuerpo

Ella rodeo el cuello de Franco con sus brazos – Porque nos podremos ver antes- respondió finalmente, antes de darle un beso que les robaría el aliento a ambos.

Cuando finalmente se separaron de aquel beso que los hacia cómplices de un mismo deseo, cada uno tomo caminos diferentes.

Empresa Grupo lactos 4:30 pm

Bárbara iba de vuelta a su oficina, al llegar vio a Gonzalo allí, la tomó por sorpresa, y aquella sensación de dicha y satisfacción desapareció sin dejar rastro. Haciéndola su rutina y triste realidad.

-¿Llevas mucho rato esperándome?- pregunto ella, al mismo tiempo que se acercaba hasta donde se encontraba él

-No mi alma, un par de minutos – respondió para después darle un pequeño beso en los labios.

-Fui a tu oficina, pero no te encontré – añadió inmediatamente

-Tuve que salir de emergencia por asuntos de la empresa, no tuve tiempo de avisarte – se disculpo