Te daré la oportunidad (Rantaro x Wakiya) [continuación]

¿amar o dejar?

La limosina ya se hallaba estacionada frente aquella gran mansión, dónde varias personas veían mas que asombrados la gran casa que tenían en frente, un señor se encontraba en la puerta, abrazando a su hijo dándole la bienvenida, y saludando a su yerno más que contento para luego dirigir su mirada a la familia de este, los cuales, no sabían muy bien como actuar, si bien no eran de una clase baja, tampoco eran de una clase alta, encajaban más como clase media, a excepción de el Akabane el cual si correspondia a una clase alta por parte de su madre que era dueña de un rancho, pero su padre al ser un campesino y haber crecido como tal, digamos que no se crío como la mayor parte de los chicos de la alta sociedad, más bien fue a una escuela normal, para gente normal, comida normal, ¿Ya dije normal?, Bueno, la cosa es que ninguno sabía actuar como se supone se debía frente a alguien importante, sus nervios no ayudaban en mucho, no estaban frente a cualquier hombre importante, estaban frente al hombre MÁS importante de todos por ser el hombre MÁS poderoso y con más riqueza, es más, si fuera por el ya de ubierá comprado el planeta entero y a toda la gente en el. estaban apunto de decir lo primero que se les viniera a la mente pero fueron salvados de milagro

—¡Wakiya!—llamo alguien a lo lejos acompañado de dos adultos, los Kiyama y el Akabane vieron que se trataba de los Karlisle, iban a hablar pero lo que escucharon los dejo impresionados

—¡Hermano!—exclamo contento este abrazando al mencionado, esto claramente sorprendió y desconcertó a los Kiyama y a él Akabane

—¡Kaito!—llamo la madre de Orochi a el señor Murasaki para luego abrazarlo, tras ella venían su hijo y el Alcazaba los cuales estaban más que felices

—Oneri—exclamo este sorprendido correspondiendo al abrazo

—tia Oneri—exclamo contento Wakiya resiviendo un abrazo por parte de esta

—mira cuánto has crecido—comento la mujer contenta

—veo que ustedes también vinieron—comento Rantaro a su amigo Silas más que contento

—no son los únicos invitados, ¿Aún no llegan los chicos?—pregunto el peli-verde y antes de que su pregunta fuera contestada escucharon unas voces conocidas a sus espaldas por lo cual voltearon

—¡Chicos!—llamo alegre un peli-azul llegando junto a sus demás amigos, un albino de ojos rojos, dos azabaches, uno de ojos verdes y el otro de ojos negros y una chica peli-azul

—que gusto verlos—comento la peli-azul asercandose a su novio para abrazarlo y depositar un beso en su mejilla

—debo admitir que nos salvaron de hacer el ridículo—le susurro el Akabane a su novio

—no creí que me los encontraría aqui—hablo una voz familiar para ambos chicos así que decidieron voltear

—¡¿Sumiye?!—exclamo impresionado Ranjiro percatandoce de la persona que acompañaba al rubio—¿Genji?—ahora si estaba mas que perdido

—¿Que hacen aquí?—pregunto el Akabane a sus amigos

—Fubuki frunció el ceño y se cruzó se brazos molesto—eso es lo que les debería preguntar yo, ¿Que hacen aquí?—pregunto molesto siendo calmado por su novio Suou

—Sumiye es sobrino del señor Murasaki, yo solo vine a acompañarlo ya que no quería venir solo, el resto de la familia Sumiye se encuentran ocupados por lo cual no pueden hacer acto de presencia—respondio Suou tratando de no sonar tan formal para que sus amigos lo entendieran